Vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas, Cruch, explicó que buscarán un acercamiento con los 9 planteles de la red y se negó a hablar de un quiebre al interior del conglomerado. 
 

Tania Merino Macchiavello
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Sólo 19 sillas bastaron para la reunión de ayer del Consejo de Rectores en Arica tras cumplir los planteles del G9 su promesa de no asistir al encuentro en el que, finalmente, participaron solo los 18 representantes de las universidades estatales y la jefa de la División de Educación Superior, Alejandra Contreras.

Sin embargo, y pese a la evidente fricción en el conglomerado, el vicepresidente ejecutivo del grupo y rector de la Universidad de Valparaíso, Aldo Valle, se negó a admitir un quiebre y anunció que sostendrán próximamente una reunión con las 9 no estatales del Consejo para avanzar en una solución.

Los motivos de este distanciamiento se remontan a la aprobación de la ley de presupuesto y desde entonces el G9 se ha restado de dos encuentros. 

"Los motivos que a veces generan discrepancias tienen un carácter coyuntural, transitorio", manifestó, restándole dramatismo a las teorías de partición del conjunto. 

Según Valle, en recientes conversaciones con rectores del G9, percibió una voluntad de acercamiento y de mantener la integridad del Cruch, por lo que, anunció, en los próximos días acordarán una fecha para sostener una reunión que ayude a superar las diferencias. "No es bueno reaccionar con sobresaltos y de inmediato, es bueno dejar pasar unos días y lo vamos a hacer para tener una conversación con los rectores del G9". 

Sobre los dichos del presidente de la red de las públicas no estatales, Claudio Elórtegui, quien se refirió a la actitud "poco amistosa" del rector Vivaldi, el vicepresidente Cruch expresó su desacuerdo en individualizar a determinados rectores. "Todos tenemos el deber de contribuir a que estas diferencias se superen y, por ello, no participo de la idea de que aquí haya algo así como un rector responsable, creo que puede ser injusto", expresó. 

De todos modos, argumentó que lo planteado por Elórtegui obedece a una manifestación de malestar del grupo y a la necesidad de generar una reflexión interna, aunque, dijo, está "lejos de hablar de un quiebre, una ruptura, lo que tenemos es una discrepancia interna. Si en un país los rectores no pueden resolver sobre la base del diálogo sus diferencias eso hablaría muy mal no sólo de unos determinados rectores, sino también de ese país… Tengo confianza de que todos los colegas que integran el consejo están en esa disposición".

El miércoles Elórtegui había manifestado que no estaban dadas las condiciones para restablecer una relación de normalidad, aunque manifestó que el grupo debe ser respetado y fortalecido.

Financiamiento

En otros temas, en el encuentro en Arica Contreras presentó el cronograma financiero para 2017, presentación que fue valorada por las 18 casas de estudios presentes. "Todo indica que este será un año distinto al pasado en que no se cumplieron con la regularidad y la oportunidad que se necesitaba las obligaciones de financiamiento público", argumentó Valle.

Por último, la cita contó con la exposición de la Directora del Instituto Nacional de Estadística, Ximena Clark, para abordar la planificación del Censo 2017, en que las casas de estudios tendrán un rol activo.