SOFÍA NOVA ARAVENA
Estudiante de Administración Pública y Ciencia Política UdeC
Ayudante CEE UdeC
Una de las grandes preocupaciones en el continente europeo es el auge del populismo y su considerable éxito electoral los últimos años. Este fenómeno ha ganado terreno en la última década a través de distintos liderazgos y con sorpresa se está posicionado en Países Bajos. El populista neerlandés de extrema derecha Geert Wilders a través del Partido de la Libertad (PVV) recientemente obtuvo el primer lugar en las elecciones legislativas nacionales con un total de 27 de 150 escaños en el Parlamento y espera formar un gobierno de coalición, llamando a distintos apoyos mediante un discurso antiislamista, antiinmigración y anti Unión Europea. Wilders y los dichos de su partido aseguran que el mismo PVV no puede ser ignorado, y que el pueblo de Países Bajos debe recuperar su nación, someterse a un “referéndum vinculante” para retirarse de la Unión Europea, y abandonar ciertas obligaciones climáticas. Esto no se trata de sólo ideas, sino de un riesgo del panorama político, la simplificación de problemas complejos y el uso constante de un discurso populista y evidentemente hostil.
Sin duda los recientes resultados en Países Bajos remecen a Europa ante el ascenso del populismo y sus posibles consecuencias en la política y democracia, aunque queda cuestionarse hasta dónde llega la capacidad de estos liderazgos para generar no sólo más votantes, sino también alianzas políticas significativas. Así, Wilders el último tiempo tuvo la intención de moderar su discurso y el de su partido para captar a otros partidos políticos fuertes. Pese las pocas apariciones del neerlandés, el Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD) que obtuvo tercer lugar con 24 escaños ya se negó a participar directamente en el nuevo gabinete, y la Alianza de Ecologistas y Socialdemocrátas ya mostró disposición a trabajar desde la oposición.
No está claro cuáles serán los siguientes pasos de Wilders, qué puesto espera obtener, ni si logrará formar una coalición política efectiva; y es que ciertamente para lograr esto último debiese adoptar una posición flexible con temas que hoy son clave. Las conversaciones en Países Bajos lideradas por Wilders están comenzando y las preocupaciones son varias. ¿Podrá instalar este populismo y enfoque simplista?