La paridad de género debería permear los distintos poderes del Estado, entre ellos el Poder Judicial y específicamente en lo que a los tribunales superiores de justicia refiere.
Kimberly Iglesias Morales
Colectiva – Justicia en Derechos Humanos
Corporación y Oficina Jurídica.
El pasado martes 16 de febrero del presente año, la ministra Andrea Muñoz, encargada de los asuntos de género y en general, de desarrollar todas aquellas acciones vinculadas con la incorporación de la perspectiva de género en la administración de justicia, se convirtió en la primera mujer en asumir el cargo de presidenta de la Excelentísima Corte Suprema al subrogar al actual presidente.
Esto representa un gran avance en materias de género. Cabe destacar que desde que se instituyó la Corte Suprema (año 1823) la presidencia solo había sido ejercida por hombres. Es más, hasta el año 1893 se prohibía a las mujeres ingresar al Poder Judicial. No obstante este importante avance, aun existe una amplia brecha de género en la judicatura del máximo tribunal de nuestro país.
De acuerdo a un estudio realizado por la secretaría técnica de igualdad de Género y no Discriminación, de la cual la ministra antes mencionada es encargada, la brecha de género se ha ido reduciendo paulatinamente en los tribunales de justicia.
Así, al 31 de diciembre del año 2020 13.103 personas integran el Poder Judicial de las cuales un 58,1% son mujeres y un 41,9% equivale a hombres, existiendo una mayor presencia de mujeres, situación que no se refleja cuando del ejercicio de la judicatura en los tribunales de mayor jerarquía se trata. De acuerdo al mismo estudio, el mayor número de juezas se concentra en los tribunales de menor jerarquía (los de primera instancia), mas no en los tribunales superiores de justicia como son las Cortes de Apelaciones y más notoriamente en la Corte Suprema (máximo tribunal de nuestro país), donde el cargo de ministro se desempeña en un 60% por hombres mientras que solo el 40% por mujeres. Circunstancia que queda de manifiesto si consideramos que desde el año 1823 han sido nombrados como Ministros de la Corte Suprema 216 hombres y como Ministras solo 11 mujeres, siendo la primera mujer en desempeñar este cargo, Maria Antonia Morales (en el año 2001).
Teniendo en consideración lo anterior, queda de manifiesto que aun queda mucho trecho por avanzar en lo que a perspectiva de género y específicamente paridad de género respecta, situación que tenemos la oportunidad de cambiar en la redacción de una Nueva Constitución pues, la paridad de género debería permear los distintos poderes del Estado, entre ellos el Poder Judicial y específicamente en lo que a los tribunales superiores de justicia refiere para que el gran hito histórico y, según también lo señaló la ministra Andrea Muñoz, se produzca cuando el pleno de la Excelentísima Corte Suprema designe a una mujer como presidenta.