Opinión

Ciberexpuestos

Lo que la pandemia hizo en el fenómeno de digitalización, no ha logrado hacerlo con el avance legislativo de normas indispensables para minimizar los riesgos presentes en el ciberespacio.

Por: Diario Concepción 12 de Diciembre 2020
Fotografía: Un nuevo proyecto musical creado desde el encierro y el contexto pandémico hace su debut este viernes con un primer sencillo. Se trata de Donki Bit, dueto compuesto por Pato Iturra (guitarra y composiciones) y Javi “Kai” Andrade (voz), quienes rescatan en su propuesta elementos del trip hop, con tintes del indie e inspirado por […]

Ximena Sepúlveda Barrera
Profesora del Departamento de Derecho Privado de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Concepción

En los últimos meses hemos sido testigos de graves ataques informáticos a infraestructura crítica en Chile: las bases de datos de Banco Estado y del Gobierno Digital, ambos con generalizados efectos dañosos en la ciudadanía. En el ámbito privado muchas empresas han sido también víctimas de ciberataques, Cencosud fue uno de los últimos blancos de los ciberdelincuentes, que han afectado la confidencialidad de sus datos (que suelen ser nuestros datos personales), la continuidad de su negocio y la operatividad de sus sistemas.

Desde un primer punto de vista, se puede afirmar con bastante exactitud que la pandemia aceleró la digitalización de la economía y la sociedad, lo cual trajo consigo muchos beneficios para las organizaciones, entre los cuales se cuenta la posibilidad de llegar a nuevos mercados a menores costos, pero también creo nuevos riesgos, entre los cuales están algunos que pueden acarrear la responsabilidad civil e incluso penal de aquellas. En el otro extremo, lo que la pandemia hizo en el fenómeno de digitalización, no ha logrado hacerlo con el avance legislativo de normas indispensables para minimizar los riesgos presentes en el ciberespacio, ya que como es sabido existen varios proyectos de ley con larga demora en el Congreso, cuestión que urge acelerar.

Estamos ciberexpuestos, no hay otra conclusión posible. Lo que queda entonces es -por ahora- el autocuidado a nivel organizacional, a través de políticas internas de gestión de riesgos en ciberseguridad (compliance), y a nivel individual, estableciendo buenos hábitos de higiene digital (mejores contraseñas, navegación solo en sitios seguros, evitar redes públicas, etc.) que eviten no solo delitos en el ámbito financiero, sino que además otro tipo de ilícitos tales como infracciones de derechos de autor, fraudes informáticos, la pornografía infantil, los delitos de odio y violaciones de seguridad de red, por solo citar algunos.

Etiquetas