Julio Escámez no podría ser caracterizado como a la usanza historiográfica del arte chileno del siglo XX, tratando de situarlo en una generación.
Javier Ramírez Hinrichsen
Historiador del Arte
Jefe de la Unidad de Patrimonio – Vrim UdeC
Director de programa de Magíster en Arte y Patrimonio-UdeC
El periodista y escritor chileno, José Miguel Varas (1928-2011), publicó en 2005 la novela de ficción con cruces con la investigación periodística, titulada “Los sueños del pintor”, donde entrevista a un “pintor” nacido en Antihuala, comuna de Los Álamos, Provincia de Arauco. Sin embargo, es la conversación con Julio Escámez (1925-2015). El domingo 15 de noviembre pasado se recordaban los 95 años de su natalicio.
¿Qué sabemos de Escámez? Su participación como ayudante del pintor Gregorio de la Fuente en la ejecución del mural “Historia de Concepción”, en el edificio del Gobierno Regional en Concepción (ex EE.FF.), o en los murales “Historia de Medicina y la Farmacología en Chile” (ex Farmacia Maluje, Tucapel n°676, 1958), “Principio y Fin” (Salón de Honor, edificio de la municipalidad de Chillán, 1972), destruido por militares tiempo después del Golpe Militar de 1973. En 1974 inicia su autoexilio en Costa Rica.
Aunque la cuestión de su trabajo como grabador ha sido últimamente abordada por la investigadora y académica del Departamento de Artes Plásticas, Bárbara Lama, en un capítulo del libro “Diagonal Biobío. Emergencia de la escena cultural penquista” (Editorial Dostercios, 2020), se desconoce su trabajo como ilustrador en diarios locales a fines de la década del 40 en el siglo pasado. O también, su vinculación no sólo con Pablo Neruda, sino también con Alfonso Alcalde, Winett de Rohka, Gonzalo Rojas y Miguel Serrano, en el uso de dibujos y grabados de las ediciones de las obras de estos poetas y escritores. Menos, su colaboración en la revista Hoy a mediados de la década de los 80.
Julio Escámez no podría ser caracterizado como a la usanza historiográfica del arte chileno del siglo XX, tratando de situarlo en una generación. A partir de una copia del dossier utilizado en la postulación de Escámez al Premio Nacional de Artes Plásticas, cuestión que no logró, menciona el desinterés en el trabajo comercial o en participar en bienales u otros medios de circulación artística.
Por tal motivo, es fundamental citarlo (1972): “Arte es comunicación entre hombres. El arte hermético no es arte”. Puede que esta idea se encuentre vinculada al desarrollado del Arte Conceptual y de Acción tanto en Chile como en Latinoamérica. La reafirmación de su posición como un pintor “realista”, como el mismo se definía. El pintor de Antihuala, en este sentido, está más vigente que nunca, presente aún si pensamos los hechos vividos como país desde octubre del año pasado.