Anímate a pensar en la lista de los discos imprescindibles que llevarías estando atrapado en una isla desierta (o en living de tu casa) y a pensar en ¿cómo saldremos de ésta?
Roger Leiton
Departamento de Astronomía UdeC
En 1942 la BBC transmite por primera vez el programa “Desert Island Discs”. Al aire hasta hoy, invitan a algún personaje para que describa 8 discos imprescindibles que llevaría a una isla desierta. Comenzó como un esfuerzo por distraer a los británicos escondidos en refugios del incesante bombardeo y horror de la guerra. En los tiempos actuales de encierro global, ¿qué lista musical sería imprescindible para la humanidad?
A mediados de 1977, las sondas espaciales Voyager 1 y 2 debían iniciar su gran tour por el Sistema Solar para capturar los colores y formas de Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno como nunca antes. En diciembre de 1976, el astrónomo Carl Sagan recibe una llamada del director del proyecto pidiéndole que organice un mensaje para incluirlo en ambas naves. “Estás contra el tiempo y casi no tenemos cómo financiarte”, agregó el funcionario de NASA. Sagan ya era un astrónomo muy popular entre el público norteamericano, un ambicioso científico quien no temía incursionar en temas más allá de su área. Tomó el desafío -junto con un grupo de escritores, artistas y científicos- de recopilar la información para crear un mensaje representativo de la especie humana en caso de que las Voyager fueran interceptadas por algún alienígena distante. Durante 5 meses el grupo discutió intensamente qué incluir y por qué. Debía hacerse bien, después de todo iba a ser una tarjeta postal musical de parte de todo el planeta Tierra para el Cosmos.
El resultado fue el Golden Record, un disco fonográfico de cobre bañado en oro de 30 cm. y una cubierta con instrucciones para leer lo. El alíen que lo encuentre podrá disfrutar de imágenes, así como sonidos terrestres: el llanto de un bebé, el “muack!” de un beso, una rana croando, truenos, entre otros, además de 27 piezas musicales de diferentes culturas y épocas. El Cosmos podría algún día escuchar a Bach, Chuck Berry, una canción búlgara, a niñas pigmeas de Zaire entonando un himno, o una canción de una boda peruana. Quizás no estemos 100% conformes con la selección, y es muy probable que las naves Voyager nunca sean encontradas por una civilización extraterrestre, pero el Golden Record fue una oportunidad para preguntarnos ¿qué somos?, ¿qué nos representa? Somos una especie aislada en un pequeño planeta, dando los primeros pasos hacia las estrellas antes de autodestruirnos o que arruinemos la Tierra irreversiblemente. En tiempos de pandemia, cuando cada habitante del planeta debería quedarse en su casa tanto como pueda, anímate a pensar en la lista de los discos imprescindibles que llevarías estando atrapado en una isla desierta (o en living de tu casa) y a pensar en ¿cómo saldremos de ésta?