Por: Jorge Porter Taschkewitz
Si bien existen áreas del Estado que funcionan relativamente bien, hay otras que lo hacen de una manera muy deficiente comparado con lo que se espera de ellas para el siglo 21. Se ha aumentado la cantidad de trabajadores del sector público, sin aumentar la productividad ni mejorar la calidad de los servicios otorgados.
Sin desconocer que algo hemos avanzado en mejorar la calidad de vida de los chilenos, con la excepción de esos entre 2 a 4 millones de compatriotas que aún están en la pobreza, lo dramático es que llevamos muchos años planificando lo que se debe hacer, imprimimos planes y Estrategias de Desarrollo Regionales para largos períodos y que, finalmente, nadie exige ni hace seguimiento de si cumple o no lo programado.
“Del dicho al hecho hay mucho trecho”, representa lo poco que hemos avanzado respecto al potencial que hemos tenido y que tenemos.
Además, por años se ha hecho informes, libros, ensayos, seminarios y eventos sobre lo que Chile debe hacer los siguientes años. Temas bien planteados y fundamentados para mejorar como: la eliminación de la pobreza, modernización del Estado, mayor incorporación de la mujer al trabajo, mayor crecimiento económico, descentralización y desconcentración del país, seguridad ciudadana (delincuencia y narcotráfico, incluídos), desempleo juvenil, sistemas carcelarios, educación, salud, trato a menores y ancianos, eliminar la burocracia, etc.
Y un Presidente nos dijo que Chile será desarrollado el año 2010, y aquí estamos aún “entre Tongoy y Los Vilos”, con bajo crecimiento económico y social, evidente negligencia y mal trato a menores y ancianos, terrorismo y delincuencia, alta concentración en Santiago, con leyes mal diagnosticadas y peor legisladas, con enormes recursos en bonos soberanos sin utilizarlos sabiamente. Algunas autoridades que no entienden la diferencia entre autoridad y responsabilidad, instituciones estatales en disputas que sólo favorece a los malos, poca preocupación por el futuro que ya está encima y nos afectará duramente por no saber tomar medidas en forma proactiva.
Por la importancia que creo tiene, menciono la eliminación del lucro en la educación como una medida ideológica peligrosa, y que sus seguidores van a tratar de extender a otros sectores, siendo que el mundo va en sentido contrario. El motivo es que privados utilizan fondos públicos y no se debe lucrar con ellos, ¿alguien cree realmente esto?, ¿cuantos otros sectores obtienen ganancias utilizando bien los fondos públicos, los que participan en ChileCompra por ejemplo?, ¿piensan que los emprendedores e innovadores van a hacer productos defectuosos o dar malos servicios para ganar algo en el corto plazo y que sus clientes no les compren más?, ¿qué impuestos va a obtener el Estado si las empresas no generan ganancias?
Cambiemos nuestra actitud, sepamos controlar mejor y entendamos que en la globalización somos interdependientes cada vez más y los temas son holísticos, afectándonos a todos. No podemos seguir viviendo como si fuéramos enemigos, internamente o considerar muy poco lo que sucede en el resto del mundo.
Usemos más “nosotros” y menos “ellos”. Es más lo que nos une que lo que nos separa, pero no a través de más Estado sino de mejor Estado.