Opinión

Otro nivel de crítica social

Por: Procopio 02 de Febrero 2018

Hesíodo, un poeta griego de Asia, viviendo, no se puede asegurar demasiado bien, en el siglo VII a.C., en una de sus obras, Teogonía, describe el mito de las cuatro edades, contribuyendo con la idea de sucesión cíclica de eventos en el devenir de la vida del hombre, quien, según su pesimista concepción, va de mal en peor. No es una idea nueva, para él  en el principio hubo una edad de oro, luego vino la de plata, bronce y hierro, cada una de ellas más mala que la precedente.

La imagen de un pasado mejor y de la degeneración de la sociedad actual ha sido y es una constante en el pensamiento de todas las épocas, siendo plasmado a menudo por los poetas. En alguna parte, Hesíodo comenta con bastante amargura: “¿Adónde iremos a parar con la juventud de hoy?… antes respetábamos a nuestros mayores…”, una pregunta y un comentario comparativo con otros tiempos anteriores  que no ha dejado de hacerse desde aquellos felices tiempos, con igual conclusión

Durante el reinado de Trajano escribe Decimo Junio Juvenal,  sus Sátiras son una fuente vital para el estudio de la Antigua Roma desde un vasto número de perspectivas, como se puede apreciar en sus  afirmaciones que dejan  testimonio de una profunda desilusión relativa al estado de la moral y las costumbres, o valores, predominantes en el alto imperio.

A primera vista, las Sátiras pueden leerse como una crítica brutal de la Roma, sus descripciones, como las de Hesíodo,  resultan ser un antídoto contra el exceso de optimismo, pero al mismo tiempo, por lo elegante de su construcción, un bienvenido respiro frente a las contemporáneas críticas sociales del humorista de turno, haciendo uso y abuso de lenguaje grosero, de rápida apelación a la así llamada picardía nacional.

 

                   PROCOPIO

Etiquetas