Diario Concepción Radio UdeC TVU Noticias La Discusión
Opinión

Opinión: "Sólo llanto", por

Por: Diario Concepción 17 de Abril 2017
Fotografía: imagen_Principal-714.jpg

Jorge Condeza Neuber
@jorgecondezan

Al bajarse Lagos muchos lloran, porque se va el último estandarte de la exitosa transición de la dictadura a la democracia. Queda alguno revoloteando, pero ninguno de los que comandaron esa épica batalla, en primera línea.

Otros han llorado al enterarse que las primarias no son obligatorias, ya que daban por sentado que las habría entre Guillier, Lagos y Goic, y ahora descubren que el sistema es simplemente algo para ir acomodando la carga, porque antes de las primarias puede haber encuestas y antes, o después, el voto secreto del “comité central”. Hoy las primarias son una suerte de fuelle negociador de candidaturas a presidente y a los codiciados cupos parlamentarios. Suena como “dame un cupo o te hago una primaria”, algo matón, pero es la verdad.

¿A quién le conviene una primaria hoy? A la NM para llegar con candidato único. A Guillier, por cierto, no solo para que pase rápidamente al olvido su famoso compromiso: “sin primarias no seré candidato”, sino para aprovechar rápido, lo más rápido posible, que va mejor en las encuestas que cualquiera de la NM. También le conviene a la DC, pero para negociar su plantilla parlamentaria.  

Por eso Goic (a quien  no le convenían las primarias), también lloró a Lagos, que le quitaba votos a Guillier, y llora porque no supo aprovechar su momento, el día siguiente al funeral de Aylwin, en que debió lanzarse y declarar una candidatura presidencial apoyada por un mensaje claro anticorrupción. Si la DC le da el favor de las primarias a Guillier, será a cuenta de jugosos cupos en la Cámara y el Senado, aunque la derrota sea vergonzosa y el llanto dure años. Si el PS no cede cupos no habrá primarias.

¿Y en la derecha? No teniendo Piñera un contrincante que le haga el peso, una primaria solo lo perjudicaría, ya que se abrirían flancos que finalmente podrían favorecer a la NM. El único que llora por una primaria es Ossandón, el senador, que no lo trataría precisamente con guante blanco, ya que aunque se sepa con nulas posibilidades de ganar, la primaria le sirve para ser conocido a nivel nacional en forma gratuita, y así posicionarse para la elección del 2022, que es lo que realmente busca.

Cuento corto, las primarias no son lo que esperábamos. Un espacio para discutir ideas, de plantear proyectos y ver realmente quien representa mejor a cada sector político. No siendo obligatorias, pasan a ser únicamente un dato más en el proceso de negociación de los partidos por el cupo asegurado en las parlamentarias y en los cargos menores, que posteriormente habrá que repartir.

Con Lagos se terminó la política en serio. Eso da para llorar. Ahora se está por lo utilitario, por lo necesario al interés particular, retratado por la frase de Andrade de que ahora se debe dotar a Guillier de contenido.

Por eso todos lloran.

Etiquetas

Notas Relacionadas