El tenor de los discursos, las señales, conversaciones con el resto de las autoridades políticas tuvo un fondo totalmente territorial y de la generación de políticas públicas de corto, mediano y largo plazo.
La visita del Presidente Gabriel Boric, como ya se ha mencionado, fue la primera de su mandato con carácter oficial en la Región del Biobío al margen de algún hecho de emergencia como lo ocurrido durante en el verano con los incendios forestales.
Es por ello que el tenor de los discursos, las señales, conversaciones con el resto de las autoridades políticas tuvo un fondo totalmente territorial y de la generación de políticas públicas de corto, mediano y largo plazo.
Tras el Gabinete Regional, realizado en dependencias de una Delegación Presidencial rodeada por ciudadanos
que esperaron ver al mandatario, el Presidente Boric se refirió a una serie de temas contingentes para la Región
del Biobío como la crisis de Huachipato, la continuidad y eficacia del Estado de Excepción, crisis vial y la conectividad y la situación anual de incendios forestales.
“El Estado de Excepción, en particular en la Provincia de Arauco, ha tenido resultados que han sido auspiciosos y hemos logrado encauzar este tema también desarticulando a bandas que operaban, por ejemplo, en materia del robo de madera o que cometían acciones delictivas de manera permanente”, dijo el Presidente.
Sin embargo, señaló que dichas acciones ilícitas, como otras, siguen ocurriendo en la Macrozona Sur, refiriéndose, además, a la reciente quema de una iglesia en Tirúa a horas de su visita a dicha comuna ayer por la tarde.
“Pero como bien decía la ministra (de Interior, Carolina Tohá), el Estado de Excepción no se puede transformar en norma regular y llevamos mucho tiempo. Tenemos que pensar en un desescalamiento, pero para eso, hay que primero garantizar que estén dando resultados también las otras dos patas de la estrategia para el conflicto en la zona”, agregó Boric, las que se enfocan en mejorar y fortalecer las inversiones y el desarrollo social (conectividad, viviendas, Plan Buen Vivir, etc).
Ahora lo que resta es que los compromisos e ideas se materialicen. Para ello será clave el rol de los alcaldes, los mismos que tomaron protagonismo durante el estallido social y la pandemia, y que durante estos días lo volvieron a retomar al ser parte de la masiva reunión sostenida junto al Mandatario donde pudieron dar cuenta de sus quejas y problemas, esas que muchas veces producto de la distancia y la cultura centralista cuesta que lleguen a La Moneda.