Tres investigaciones en curso, 2.500 controles de identidad, 7 decomisos y 30 detenidos fue el balance que hicieron autoridades locales y policiales, a mediados de esta semana.
Ante los buenos resultados que generó el copamiento policial en el centro de Concepción, para evitar el comercio ilegal y otros delitos que circundan la cuestionada actividad, otras comunas y zonas penquistas apuntan a lo mismo, bajo la perspectiva de que tienen igual derecho de acceder al despliegue policial.
Este jueves se cumplió una semana de la medida y el éxito está a la vista de todos los que transitan por el corazón de la ciudad penquista: no hay ambulantes y la presencia de efectivos de Carabineros ha sido clave.Tres investigaciones en curso, 2.500 controles de identidad, 7 decomisos y 30 detenidos fue el balance que hicieron autoridades locales y policiales, a mediados de esta semana, respecto de los resultados de la acción policial.Después de largos meses -y tal vez, años- el incremento en la seguridad y el tránsito con más libertad en el Paseo Peatonal de Barros Arrana son patentes.
Lo que genera, por supuesto, que, desde comunas como Talcahuano y otras zonas penquistas, como el sector aledaño al Hospital Regional, se plantee la inquietud: ¿Por qué para nosotros no se puede aplicar la misma medida?
“Sabemos que existe una sensación de inseguridad muy grande en algunos sectores, por lo tanto, también hemos puesto a disposición a las policías para poder hacer rondas que, de alguna forma, nos permitan poder bajar esa sensación y también hacer controles de identidad para avanzar en ese objetivo”, dijo la Delegada Presidencial, Daniela Dresdner, tras reunirse con autoridades de Talcahuano, quienes piden mayor refuerzo policial.
“Teníamos una situación perentoria en todo el casco urbano céntrico que derivó en el copamiento policial, que habíamos solicitado hace bastantes meses. Luego de ello, debemos analizar una segunda etapa, como, por ejemplo, las situaciones que se viven alrededor del Hospital Regional”, dijo el alcalde de Concepción, Álvaro Ortiz, para argumentar la opción de extender el copamiento.
¿De lo bueno, poco? Cuando todos aspiran a lo mismo, al parecer, la respuesta es: Sí.