Editorial

Contradicciones partidarias

Por: Diario Concepción 01 de Junio 2021
Fotografía: Carolina Echagüe

En las últimas semanas dos reformas, muy discutidas en su momento en el Congreso, se han tomado el debate político: la Ley de Primarias y la implementación del voto voluntario y la inscripción automática. En el caso de la primera, una vez más quedó en evidencia que la utilización de dicho mecanismo, que contribuye a la participación ciudadana para la elección de candidatos y candidatas, no es precisamente una opción que consideren todos los sectores.

De hecho, en menos de un año, la actual oposición (sus cúpulas partidarias, para ser más precisos) ha desistido de las mismas primarias que impulsó y promovió en el pasado reciente. Y, quizás lo peor, protagonizando espectáculos lamentables. Y fueron los propios candidatos, en algunas emblemáticas comunas, los que decidieron llevar a cabo este proceso de participación. Hualpén fue un ejemplo de ello, no así Talcahuano.

En ambos, la oposición obtuvo resultados diametralmente opuestos. Otro caso es el eventual retorno del voto obligatorio, donde hoy todos parecen estar de acuerdo. Un escenario diametralmente opuesto al de hace unos pocos años.

Cuando se discutió el término de la obligatoriedad que regía desde fines de la década del ‘80 y la implementación del voto voluntario y la inscripción automática, no eran pocos los que rasgaban vestiduras en favor de la libertad de los ciudadanos a decidir si concurrían o no a las urnas.

No eran pocos los que se referían al “interesante desafío” que iba implicar hacer una mejor política para convencer a los votantes. Es más, pese a la baja participación, muy pocos (casi nadie) se quejaron tras las elecciones los presidentes Michelle Bachelet y Sebastián Piñera.

Y, sin ir más lejos, en octubre todos aplaudían la tremenda demostración de participación ciudadana, cuando la opción Apruebo se impuso de manera categórica. Ese plebiscito fue el referéndum con mayor número de votantes, desde que el sufragio se convirtió en opción voluntaria.

¿Qué pasó ahora? ¿Por qué tan repentino deseo de volver a cambiar las reglas del juego, y ojalá antes de los próximos comicios de noviembre? Quizás la respuesta esté en los resultados de mayo y como se inició un cambio, que por cierto, no deja muy contentos a quienes hoy legislan y también responden a intereses partidarios.

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