Desde que varias comunas avanzaron desde la cuarentena a la fase 2, es común ver mucha circulación de gente. La pandemia no ha terminado y hay que ser responsables.
El reporte sanitario dado a conocer ayer informó de 196 nuevos casos en la Región y el número de activos se cifró en 1.294. Más allá que en este último indicador hay una baja considerable en relación hace unas semanas, lo cierto es que en la cantidad de contagios diarios la media se mantiene cerca de los 200. Sin dudas, la pandemia está lejos de considerarse más controlada en Biobío.
Hace unos días, varias comunas, entre ellas Concepción, Talcahuano ySan Pedro de la Paz, dejaron el estado de confinamiento total para avanzar a la fase 2 del plan Paso a Paso, que sólo mantiene una cuarentena estricta los fines de semana. Por ello, de lunes a viernes se puede circular con total libertad, más allá que el llamado de todos sea a salir del hogar sólo en caso de ser necesario.
Desde que se pasó a esta etapa, es común ver aglomeraciones importantes como se ve casi a diario en el centro de Concepción. La pandemia no ha terminado, por más que ahora exista un poco más de libertad y, por eso, para mantener la situación lo más controlada posible la responsabilidad ciudadana sigue siendo un factor fundamental.
Más allá que las cifras no hayan bajado de forma considerable, es probable que varias comunas del Gran Concepción, como el propio Concepción, Talcahuano, Penco, Chiguayante, Hualpén y San Pedro de la Paz, se muevan de la fase 2 a la etapa 3, de Preparación. Si esa posibilidad llega a concretarse, bien vale preguntarse cómo reaccionará la ciudadanía si a la libertad que ya tiene en estos momentos se agrega no tener restricciones de desplazamiento durante los fines de semana.
Es de esperar que se evalúe muy bien esta medida antes de implementarse -se anunciaría el jueves-, pues si algo ha quedado claro durante la pandemia es que buena parte de la ciudadanía no sabe de autocontrol, de responsabilidad individual ni de empatía con el resto de la población.
Es un mensaje que se ha repetido hasta el cansancio, de forma casi majadera, pero en vista de la evolución de las cifras no está de más reiterarlo. Es necesario que todos pongamos de nuestra parte para controlar esta emergencia sanitaria y, en ese sentido, una de las maneras más importantes para mostrar ese compromiso es aprovechando responsablemente las libertades que se van entregando, para no volver a retroceder.