Editorial

Vacuna: una política de Estado

Puesto que hay limitaciones para desarrollar y producir una vacuna en Chile, es imperioso definir políticas que aseguren un suministro confiable y a precio justo en un futuro cercano.

Por: Editorial Diario Concepción 19 de Julio 2020
Fotografía: Referencial | Agencia UNO

Esta semana el país conoció los nombres de los siete integrantes del Comité de Asesores Científicos que harán parte de la Estrategia Nacional de Vacunas Covid-19, iniciativa liderada por el Ministerio de Ciencia. Médicos, investigadores y representantes de la industria conforman el comité, que tendrá la misión de garantizar el suministro oportuno y equitativo de una vacuna para enfrentar la pandemia.

Los desafíos son gigantescos. Los especialistas deben evaluar el avance en el desarrollo de una vacuna, los beneficios para nuestro país, cláusulas de precios, factibilidad para realizar ensayos, volumen, entre otras materias. Según las autoridades, en agosto deberían comenzar las pruebas en humanos para una vacuna contra el coronavirus en Chile.

Y esa es probablemente la pregunta que millones de personas se hacen todos los días: ¿Cuándo estará lista la vacuna contra la Covid-19? La Organización Mundial de la Salud asegura que existen 23 vacunas en evaluación clínica y 140 vacunas en investigación preclínica. Las empresas Pfizer ( farmacéutica estadounidense) y BioNTech (biotecnológica alemana) presentaron resultados preliminares de cuatro vacunas que desarrollan en conjunto. En India, las autoridades sanitarias anunciaron que una vacuna estará disponible a más tardar el 15 de agosto de 2020. Investigadores de Canadá, Inglaterra, China, Estados Unidos, Rusia e Israel también anunciaron avances en un antídoto para la Covid-19. Laboratorios de la India, Europa y Estados Unidos se alistan para producir en escala. Un esfuerzo sin precedentes a tan sólo 6 meses desde la aparición del virus.

Los prototipos de vacunas deberían pasar por todos las etapas clínicas, pruebas, publicación en revistas especializadas y revisión de pares académicos en un largo proceso que suele consumir varios meses. Adicionalmente, una cosa es desarrollar la vacuna clínicamente y otra es la capacidad para producirla en escala y a precios que los países puedan pagar.

Puesto que hay limitaciones para desarrollar y producir una vacuna en Chile, es imperioso definir políticas que aseguren un suministro confiable y a precio justo en un futuro cercano. El acceso universal debe ser una política de Estado. En esa línea, juega un rol decisivo el Comité de Asesores Científicos.

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