Se observa en los jóvenes una actitud consciente de la necesidad de cambiar el mundo, que, encuesta o no, debería ser la reacción propia de una juventud sana que se da cuenta que tiene la responsabilidad de cuidarlo, en su condición indelegable de herederos.
El tiempo parece fluir con mayor rapidez, como consecuencia de rápidos cambios en todos los ámbitos, la obsolescencia llega con inédita velocidad, estas circunstancias no afectan sólo el universo de las cosas, sino ampliamente aquel de las personas. Un ejemplo palpable es el relativamente próximo cierre del reinado de la juventud millennial, para ser reemplazada por los muy despiertos jóvenes pertenecientes a la generación Z, como se ha dado en llamar a aquellos nacidos entre los años 1994 y 2010, un colectivo heterogéneo de jóvenes de hasta 24 años, nacidos en pleno auge de las redes sociales. En un período de velocidad extrema para tan fundamentales decisiones, un gran número de estos jóvenes se encuentra en la fase de postulación a las carreras que, para muchos, definirán sus vidas.
Muy oportunamente, se ha conocido los resultados de la consulta levantada por Elige Educar, de la encuesta “Generación Z: elecciones, expectativas y valoración de la educación”, que consultó a 3.442 jóvenes nacidos entre 1995 y 2001 que habían manifestado interés en estudiar carreras de Educación. El objetivo del estudio era conocer a esta nueva generación de estudiantes, saber cómo se informan, qué factores influyen en su decisión para elegir una carrera, cuáles son las expectativas sobre su trabajo futuro y cuál es su valoración de la educación y la docencia.
Es muy interesante observar que aunque el 80% de ellos declara usar WhatsApp “siempre”, sus medios de comunicación preferidos eran la radio y los diarios, incluso por sobre las redes sociales como Twitter, aunque sólo el 7% declara usar siempre estos medios, congruente con otros antecedentes que prueban su interés por tomar decisiones con bases seguras, sobre todo, en lo referente a la elección de sus carreras.
En la elección de las carreras estos jóvenes aluden como factores relevantes lo que les gusta y aquellas que permita contribuir al cambio social, con 71% y 74%, respectivamente, en efecto, al momento de decidir qué es lo más importante en el trabajo ideal para ellos en el futuro, el 58% declara que es tener un impacto positivo en la sociedad.
Para los autores de la encuesta, el mundo actual, con sus crisis sociales y económicas, con la amenaza de daño ambiental, ha determinado en los jóvenes una actitud consciente de la necesidad de cambiar el mundo, que, encuesta o no, debería ser la reacción propia de una juventud sana que se da cuenta que tiene la responsabilidad de cuidarlo, en su condición indelegable de herederos.
Esta generación bien puede ser la mejor informada de la historia en cuanto a sus posibilidades en Educación Superior, 75% declara que se ha informado sobre las carreras, 69% sobre las universidades y 68% sobre las becas para financiar sus estudios por medio de sitios web y más de la mitad a través de encuentros presenciales, como ferias de universidades, 58%, o directamente en su colegio. Casi la mitad de los jóvenes señala que sus padres y sus profesores son quienes más influyen en su decisión respecto de qué carrera estudiar, la opinión de amigos y otros medios, como youtube, es aludida en porcentajes menores a un dígito. Aunque, en sus propias declaraciones, al final, son autónomos en su decisión.
Los resultados de esta encuesta son profundamente alentadores, la juventud chilena parece estar muy consciente que el progreso futuro está claramente en sus manos.