Esto según un estudio de la Universidad Católica del Norte. También prevé una reducción de 150 mil habitantes desde Biobío, por un efecto de movilidad, y una mayor absorción de población intrarregional en Concepción, Talcahuano y Coronel.
Un estudio de la Universidad Católica del Norte (UCN) sobre eventuales impactos tras la eliminación del pago del impuesto territorial para la primera vivienda, más reconocido como contribuciones, proyecta mediante un modelo económico matemático, que los presupuestos municipales pueden decaer, en promedio, en un 64% en el país.
Lo anterior, en el contexto de la propuesta que impulsa el Partido Republicano en el Consejo Constitucional que busca terminar con el gravamen.
Del mismo modo, el análisis prevé una reducción de 150 mil habitantes desde Biobío hacia la Región Metropolitana, y una mayor absorción de población intrarregional en Concepción, Talcahuano y Coronel.
El Dr. Dusan Paredes, economista, exdecano de la Facultad de Economía y Administración y director del Departamento de Economía de la UCN, quien lideró el estudio, explicó que se usó el modelamiento especial cualitativo, “que no es muy común en países en vías de desarrollo” y que “se comenzó a generar hace aproximadamente 10 años debido a que los países demandan una evaluación más específica de las políticas(…) y que permite incorporar un efecto positivo y negativo, es decir, un impacto neto”.
Requerido acerca de cómo se llega a proyectar un 64% menos en promedio en el presupuesto de los municipios, Paredes contó que “uno de los efectos negativos en términos de los presupuestos municipales es mucho mayor respecto de los ingresos donde se perderá mucho más en oferta de bienes públicos que lo que se ahorraría anualmente por no pagar el impuesto”.
En línea con lo anterior, el académico dijo que “cuando se alteran los presupuestos públicos de los municipios, la gente se relocaliza (…) haciendo subir el precio de las viviendas, aumentando los costos de congestión y afecta los costos de contaminación, lo que tiene un valor económico, por lo tanto, al sacar los impuestos territoriales (54% del Fondo Común Municipal), gran parte del componente que fundamenta el Fondo Común Municipal desaparece, porque comunas generan menos oferta de bienes públicos y de peor calidad haciendo que las generaciones futuras vean a otras más atractivas como es el caso de Concepción”.
El investigador de la UCN confirmó la proyección de salida de más 150 mil habitantes desde Biobío y a su vez, detalló que, “para más del 65% de los municipios de Chile, el Fondo Común Municipal representa más del 70% de sus ingresos(…) Concepción, Talcahuano y Coronel concentrarían población que saldría desde municipios altamente dependientes del Fondo Común Municipal como Chiguayante, Tomé, San Pedro de la Paz, Lota, Curanilahue. y Cañete (entre otros), hablamos de cerca de 10 mil habitantes, en total, desde cinco comunas que concentran población y alrededor de 45 que las pierden en la Región del Biobío”.
Lo que pasa con este movimiento de población, en la mirada del economista de la UCN, es que “además, se pueden prever caídas en los salarios de los trabajadores de las comunas receptoras como Concepción, Talcahuano y Coronel, ya que crece la competencia por esos cupos”.
Cristian Maldonado, presidente del Consejo Regional del Bíobío del Colegio Contadores de Chile A.G. señaló que “cómo Colegio de Contadores, para compartir esas proyecciones se debe conocer el modelo matemático utilizado, considerando que las municipalidades hoy día tienen distintas fuentes de financiamiento, las que se puede afectar en menor o mayor medida por los Ingresos Propios Permanentes (IPP) y el Fondo Común Municipal (FCM), que es la forma establecida para distribuir la recaudación de los impuestos territoriales (contribuciones) que van a las municipalidades y que sin ellas sin duda hay un efecto social mayor que el beneficio”.
El presidente del Consejo Regional del Colegio Contadores aportó, además, que “estudios anteriores hablaban de que las municipalidades se financian del IPP en un 46%, del FCM un 34% y Transferencias un 20%, en algunas municipalidades sus IPP pueden ir del 1% al 97% (Patentes, contribuciones, Gobierno Regional, entre otros)”. También apuntó a que “lo más importante del FCM es el 57% que proviene de contribuciones y 23% de los permisos de circulación, siendo finalmente su composición la importancia que tiene en la determinación del porcentaje final en el que se ve afectada cada municipalidad por la eliminación de contribuciones”.
Otro punto relevante para Cristian Maldonado es que como es un beneficio que apunta a las primeras casas adquiridas, “estas afectarán sólo a los contribuyentes personas naturales o empresarios individuales, por lo que los contadores respecto a sus clientes que tienen una primera propiedad, ya no deberán pagar a través del Servicio de Impuesto Internos o directamente en Tesorerías, las contribuciones, que hoy en día se distribuyen a la Municipalidad (35% a 40%) y al FCM (60% a 65%), pagados en cuatro cuotas anuales en los meses de abril, junio, septiembre y noviembre”.
En cuanto a las implicancias para los contadores que tendría la iniciativa propuesta por el Partido Republicano, Maldonado indicó que “es un tema de poca afectación para los contadores, afecta más a personas naturales, pero sin duda es más el impacto social que el beneficio que otorga”.