Capacidad logística y vial del recinto ha permitido descongestionar otros puertos del país. En la Región ven el tema como una oportunidad de elevar la productividad.
En los últimos meses el Puerto de Lirquén se ha transformado en uno de los principales atracaderos de automóviles a nivel nacional, por lo que en Biobío se está viviendo un boom de parque automotriz.
Una muestra de ello es que desde que comenzó el desembarco en Lirquén, han llegado más de 25 mil vehículos nuevos, lo que permitió establecer una nueva marca de este segmento en la Región. En las últimas semanas, también se han producido nuevas descargas, lo que a la fecha, ha permitido incrementar la cantidad de vehículos en el recinto porque cuenta con la infraestructura portuaria y vial para cumplir con las funciones operativas necesarias que demanda un tema logístico como este.
“Desde hace unos meses han llegado varias con autos a la Región para cumplir con la función de descarga de vehículos, que por lo general, se entregan en la quinta región. Esto se debe al aumento importante de las importaciones de autos que ha ocasionado congestión y falta de espacio en la zona central”, comentó Juan Alberto Arancibia, gerente general de DP World Lirquén.
Agregó que, tanto naves como importadores han evaluado y decidido bajar al Biobío y no esperar que se abran espacios en San Antonio.
Las condiciones están
El puerto se ha transformado en el principal atracadero de vehículos de la Región porque tiene áreas disponibles para acopiar más de 7 mil autos de forma simultánea y porque tiene buena productividad de descarga.
“Hoy, la operación en Lirquén no solo es eficiente por el terminal que tenemos, sino que destaca porque estamos muy bien conectados con la salida norte de Concepción, lo que hace fácil y expedito el despacho y tránsito hacia la zona central, que es donde deben retornar los autos”, indicó Arancibia.
El terminal local ha demostrado ser una alternativa eficiente para las líneas navieras como para los importadores de autos.
“Nos interesa que esto se mantenga. Para eso, contamos con condiciones atractivas de espacio y ubicación. En el futuro, dependerá de las decisiones logísticas que tomen los importadores y de cómo se comporte la operación portuaria logística por la zona central. En la actualidad, para nosotros sigue siendo un mercado que lo tendremos en la medida que la quinta región no sea suficiente o no de abasto. Para el futuro esperamos que este tipo de carga se descargue en la Región, porque el mercado de la zona sur es de alrededor de un 20% de lo que se descarga en la zona central, por lo tanto, es un buen volumen que nos hace pensar que debemos descargar acá”, sostuvo Arancibia.
El encargado de Fomento e Industria de la actual Gobernación Regional del Biobío, Iván Valenzuela, destacó que “esta es una oportunidad que no se puede desaprovechar. A nivel regional, hemos visto que contamos con las condiciones para cumplir con esta función que eleva la productividad de la Región. Es un tema que se debe analizar y potenciar”.
Se sortearon las dificultades
Pese al buen momento, también se sortearon algunas complicaciones. El factor pandemia influyó en el sentido laboral por falta de personal, lo que se administró conforme las necesidades de la industria.
También influyeron las dificultades con las que ha tenido que lidiar el mercado como problemas logísticos y problemas de trabajo en los terminales, lo que congestionó la capacidad portuaria, siendo la escasez de contenedores, uno de los principales problemas A nivel regional. Se estima que hay casi un 20% menos de contenedores en comparación a una temporada normal.