Aníbal Torres Durán

En su primera reunión del año, el Banco Central anunció que mantendrá la Tasa de Política Monetaria (TPM) en su mínimo técnico y señaló que pese al deterioro de las condiciones sanitarias el panorama internacional no presenta mayores cambios. En el escenario externo, el panorama general para el 2021 sigue sin mayores cambios, pese a un primer trimestre algo más débil producto del agravamiento de la situación sanitaria y la reimposición de medidas de contención más restrictivas.

El ente emisor destacó también el bajo crecimiento del crédito bancario, principalmente de las colocaciones de consumo y comerciales, y consideran que la aprobación del Fogape 2.0 podría darle un nuevo impulso. Los mercados financieros locales, en general, se han acoplado al tono más positivo de sus pares internacionales.

“El Banco Central de Chile mantuvo la tasa de política monetaria dando una señal de conservar su política expansiva; sí es de preocupación la situación que se ha visto en el contexto mundial y nacional considerando que el crecimiento se ha moderado en los últimos meses debido al avance sin tregua de la pandemia, afectando principalmente a los sectores de servicios”, comentó Luis Slier Muñoz, Director de Ingeniería de la Universidad San Sebastián.

En tanto, el Consejo del Banco Central señaló que el cierre de la inflación en 3% en 2020 respondió a una mayor demanda en bienes particulares y a una lenta reposición de inventarios. Además, afirmaron que la inflación de servicios se mantiene rezagada y que, en el mediano plazo, las holguras de capacidad mantendrán contenidas las presiones inflacionarias.

En cuanto a la actividad local, el Imacec de noviembre anotó un crecimiento de 0,3% anual y de 1,1% respecto del mes previo en términos desestacionalizados, continuando así con el paulatino proceso de recuperación de la economía. Destacó en este resultado el dinamismo del comercio, que contrasta con el rezago de los servicios. Asimismo, el 2020 cerró con una inflación total de 3% anual respondiendo principalmente a algunos bienes de alta demanda que, en medio de una lenta reposición de inventarios y aumentos en los costos de transporte, han continuado impulsando la inflación en lo más reciente.

“La medida establecida por el Banco Central va en la línea de mantener políticas que vayan en la dirección de estimular la economía en dirección de generar condiciones monetarias para una reactivación, en función de que la actividad económica está muy reducida, merced esencialmente a la necesidad de mantener reducida la movilidad en el objetivo de controlar la pandemia”, sostuvo Ariel Yévenes, economista Centro de Estudios Corbiobío.

A su vez, el ente emisor anunció un tercer Financiamiento Condicional al Incremento de las Colocaciones (FCIC) por un monto de US$ 10.000 millones durante seis meses y amplió los colaterales elegibles para esta etapa desde la cartera comercial, con lo que el Banco Central recibirá carteras comerciales con una pérdida esperada de hasta un 9%. Así, con esta nueva medida, la institución monetaria habrá dispuesto en total de US$ 50.000 millones en esta facilidad.

No obstante, el consejo del Banco Central de Chile reiteró que futuros cambios en la política monetaria o en las medidas adicionales dependerán de la evolución del panorama macroeconómico, el adecuado funcionamiento de los mercados financieros y el cumplimiento de los objetivos de inflación y estabilidad financiera del Banco.