Cuando está en la cancha, de inmediato toma protagonismo. No pasa mucho para que cualquiera se dé cuenta que Renato Valenzuela es un jugador distinto, un gran proyecto no sólo del vóleibol regional, sino de todo el país. Hace poco, dio otra muestra de aquello: el alumno del Colegio San Gabriel de los Ángeles fue elegido como el mejor en la final nacional de los Juegos Deportivos Escolares en Santiago, donde reforzó al equipo del Liceo Mariano Latorre de Curanilahue con el que llegó logró el segundo puesto en dicha competencia.

Otro logro que reafirma sus convicciones, aunque a su corta edad ya tiene claro cómo debe seguir avanzando. “Comencé en el vóleibol a los siete años por la influencia de mi hermano mayor y mi mamá. El desarrollo que he tenido ha sido muy bueno. Desde muy pequeño, aprendí lo que es la responsabilidad, disciplina y que con constancia podía lograr todo lo que me propusiera. Gracias a eso, me puse objetivos y poco a poco los he ido logrando, han sido siete años de trabajo pero es un proceso muy largo, que sigue”, indicó.

Un camino donde asegura que hasta ahora ha podido compatibilizar los estudios con el deporte. “Lo he complementado de buena manera, porque tengo el apoyo de mi colegio. Asisto solo algunos días al mes, el resto tengo permiso, pues voy a entrenar a Santiago y Concepción. Me dan facilidades y nunca he tenido alguna dificultad para poder cumplir con mis deberes escolares”, dijo.

De esa gran actuación reciente en la capital, comentó que “es segundo año consecutivo que participo de los Juegos Deportivos Escolares, en 2024 obtuvimos el tercer lugar y me premiaron como la mejor recepción del torneo, este año volvimos por la revancha y aunque no logramos el objetivo final me quedo con lo lindo de haber representado a la Región, fue una muy bonita experiencia”.

Al respecto, agregó que “uno de mis objetivos era llegar a la final y lo logré, desde un principio tenía la convicción de que así iba a ser, y mi otra meta era ganar el premio del mejor jugador y, gracias a todo el esfuerzo y dedicación que le puse a los entrenamientos y al gimnasio, lo conseguí”.

Apunta alto

Sobre sus desafíos para lo que resta de la temporada, Renato indicó que “lo más próximo son las finales de Liname A1 con mi equipo Murano Concepción (si logramos el primer lugar estaremos dentro del sudamericano de clubes). Y el otro es probablemente el Sudamericano U17 con la selección chilena.

También estoy en la nómina de los Juegos de la Araucanía, pero por compromiso con la selección quizás no podré participar. De todas maneras, me encantaría jugar con Biobío este torneo”.

Y pensando más a largo plazo, afirmó que “mi sueño es jugar en las ligas más grandes del vóleibol mundial e ir escalando poco a poco en busca de ese objetivo, viviendo cada proceso y sabiendo que todo toma su tiempo. Igual quiero seguir representando a mi país y otro objetivo es clasificar a un mundial con la selección chilena. Siempre he querido ser un jugador destacado y dejar huella en cada club o selección en la que toque participar”.