Con apenas 11 años, la deportista aseguró su lugar en la selección chilena para competir en Misiones, Argentina. Talento y un rápido ascenso marcan la carrera de la única representante regional en torneos internacionales este 2025.
La gimnasia rítmica en la Región del Biobío tiene un nombre propio que comienza a abrirse camino a nivel internacional. Su nombre, Amanda Torres Fuentes. Con solo 11 años, la deportista del Club Gimnasia Rítmica Región del Biobío (GDR) continúa consolidándose como la destacada promesa regional tras clasificar al Campeonato Sudamericano de la especialidad, que se disputará en Misiones, Argentina, entre el 28 de octubre y el 3 de noviembre.
El proceso clasificatorio fue exigente. Amanda debió superar dos controles en el Centro de Entrenamiento Olímpico (CEO) de Santiago: el primero realizado el 2 y 3 de agosto, y el segundo el 6 y 7 de septiembre. Allí ratificó su crecimiento competitivo en la categoría Preinfantil (AC2), asegurando su presencia en la selección nacional que viajará a Argentina. En la instancia competirá en tres series: manos libres, cuerda y balón.
Su entrenador, Braulio Rodríguez, no esconde la satisfacción por lo conseguido por su pupila. “Amanda ha logrado convertirse en la promesa de la gimnasia rítmica regional y nacional a base de esfuerzo, constancia y disciplina. El año pasado fue reconocida como la mejor deportista de gimnasia rítmica en la Región en la premiación de deportistas destacados organizada por el IND del Biobío”, destacó.
El recorrido de Amanda ha sido meteórico. Inició su carrera en 2021, con apenas 7 años, y rápidamente mostró condiciones excepcionales. En 2024 ya representaba a Chile en el Sudamericano de Categoría Menores (Age Group) en Aracaju, Brasil, experiencia que la marcó y le abrió el camino hacia nuevas metas.
Hoy, la joven gimnasta simboliza el recambio generacional de la disciplina en el país. “Ella es parte de la nueva generación y tiene un talento impresionante; es el futuro de la gimnasia rítmica en la Región junto a un par más de pequeñas gimnastas que estamos formando, y que en uno o dos años más seguramente saldrán a la luz”, agregó su técnico.
Lo de Amanda está lejos de ser casualidad, con una rutina diaria que combina entrenamientos rigurosos, viajes constantes y un nivel de compromiso poco común para su edad.
El desafío ahora es mayor. El Sudamericano en Misiones reunirá a las principales exponentes del continente y servirá como escenario para medir fuerzas con gimnastas de países con tradición en la disciplina. Pero ella llega con la confianza de haber superado un exigente proceso nacional y con el respaldo de un equipo que cree firmemente en su proyección.