Al repasar buena parte las disciplinas a nivel nacional, es común que los encargados de encabezar los procesos sean entrenadores que vienen de otros países, sobre todo en la posición de head coach. ¿Cuáles son las razones? ¿Se confía menos en un DT chileno? Gente de varios ámbitos y deportes entregó su diagnóstico, y desde el Comité Olímpico de Chile se detalló de qué manera se realiza la selección para estos cargos.
Hacepoco, Eduardo Berizzo asumió la banca de la selección masculina de fútbol, manteniendo una tendencia que ya lleva más de una década: que el técnico sea extranjero. Desde el proceso a Japón y Corea 2022, iniciado por Juvenal Olmos, que la “Roja” no es conducida por un DT puramente nacional, ya que después vinieron Nelson Acosta -segunda etapa-, Marcelo Bielsa, Claudio Borghi, Jorge Sampaoli, Juan Antonio Pizzi, Reinaldo Rueda y Martín Lasarte.
El preferir opciones foráneas para encabezar procesos en el deporte chileno es una tendencia (ver recuadro). Por nombrar los casos más emblemáticos, en el remo el español Bienvenido Front está cerca de cumplir diez años al frente de la disciplina, en una etapa que, sin dudas, ha sido muy exitosa. Lo mismo ocurre con el también hispano Mateo Garralda, que bajo su conducción le ha dado un salto de calidad al balonmano criollo.
Independiente de estos casos, es válido preguntarse si la elección de head coaches o entrenadores extranjeros para liderar procesos en diferentes deportes es positiva. Ello porque el arribo de técnicos foráneos puede interpretarse como que en Chile no hay personas capacitadas para llevar adelante proyectos exitosos. ¿Es así? ¿Por qué se están prefiriendo en la mayoría de los casos a nombres que vienen de afuera?
Desde el Comité Olímpico de Chile (Coch), su presidente, Miguel Ángel Mujica, explicó qué criterios se toman en cuenta al momento de seleccionar a un entrenador.
“La contratación de head coaches ha sido uno de los principales motivos de los buenos resultados internacionales que ha conseguido el Team Chile en los últimos años. El perfil del cargo es muy completo, debe tener un conocimiento técnico importante pero además la experiencia y los logros que lo avalen; que sepa lo que es construir campeones continentales o mundiales. Muchos de esos cargos inicialmente se fueron completando con profesionales extranjeros, quienes a su vez hoy están traspasando ese conocimiento también a entrenadores nacionales”.
Además, desde el Coch se mencionó que se buscan profesionales que en su pasado reciente tengan experiencia liderando y dirigiendo un proceso de alto rendimiento a lo menos de cuatro años y que tenga resultados demostrables. Además, debe tener influencia además en lineamientos de trabajo con deportistas juveniles e involucrarse en el sistema de capacitación de entrenadores actuales y futuros. Igualmente, se valora especialmente que sus dirigidos hayan obtenido resultados a nivel continental y mundial, además de clasificaciones a Juegos Olímpicos.
Alejandro Gyllen es entrenador de básquetbol del club Infinito y también integra el staff de selecciones. A su juicio, “el tema de quien dirige a la selección adulta va más allá de la nacionalidad. Desde mi punto de vista depende absolutamente de las capacidades individuales que debe tener un entrenador para asumir ese rol: conocer el medio nacional a la perfección, conocimientos técnico/tácticos, estar en constante capacitación, manejo del inglés (al menos en el básquetbol es fundamental), entre otras muchas cosas”.
Además, indicó que “considero que al entrenador nacional le falta capacitarse, estudiar, salir de la zona de confort y vivir otras realidades y experiencias para luego plasmarlas en Chile. De esa forma podemos desarrollarnos entre todos, ser generosos con la información y los conocimientos que tenemos, esa es otra de nuestras grandes falencias. Sin embargo, recurso humano hay y con el paso de los años esta situación sin duda mejorará”.
Víctor Merello, histórico jugador de Cobreloa y que actualmente trabaja en las series menores de Fernández Vial, indicó que “hay muchas razones por las que hoy se buscan técnicos extranjeros. Creo que Bielsa y Sampaoli dejaron una marca tan grande, que se trata mucho de repetir ese modelo. También se mira hacia afuera porque nuestra propia competencia interna va de mal en peor, a los equipos les va mal internacionalmente y se intenta cambiarlo con la visión de alguien externo. Lo que pasa es que no siempre resulta. Chile, por idiosincrasia, confía poco en lo nacional”.
Siendo autocrítico, Merello aseguró que “sí reconozco que el técnico chileno es muy paternalista, pero también la prensa nos trata distinto. Bielsa y Sampaoli rayaron la cancha y dijeron: de esta línea para acá no se mete nadie y se les respetó. ¿Harían lo mismo con un DT chileno? Yo creo que lo criticarían, lo harían bolsa”.
El remero Felipe Cárdenas indicó que “no creo que traer técnicos de afuera sea totalmente necesario, pero sí hay que considerarlo cuando puedan ser un aporte y traer una visión distinta de disciplinas que acá tienen menos desarrollo. Hemos visto casos donde han sido fundamentales, han ayudado a levantar ciertos deportes con metodologías que acá no se trabajaban. Bienvenido Front, por ejemplo, cambió el remo chileno con su método europeo de hacer las cosas y se están viendo los resultados. Eso es palpable. Él instaló esta forma de trabajo con el sistema de entrenamiento olímpico en Curauma, todo de la mano de estadísticas, mediciones. Además, nos inculcó a todos los deportistas que no existe alto rendimiento sin tener estudios. Prepara personas, porque el deporte no es para toda la vida, hay que estar preparados para lo que viene. Trajo una visión más integral”.
En el atletismo, Margarita Masías comentó que “en la modalidad de fondo, la mayoría de los técnicos siempre han sido chilenos. En algunas otras especialidades hay atletas que han buscado entrenadores de Perú, México, de Cuba, pero no es que vengan mucho para acá. En Chile tenemos buenos técnicos, como es el caso de Jorge Grosser en nuestra zona, un par más en Santiago y también más al sur, que son gente de mucha experiencia y que sus resultados hablan de su buen trabajo. Creo que el entrenador chileno está bien preparado y eso significa estar actualizado, conocer nuevos métodos de trabajo, qué es lo que se está usando”.
Evelyn Bastidas, entrenadora de hockey del Club Amanecer, dijo que “los entrenadores más importantes que hay hoy a nivel de selección en el hockey son argentinos, y allá este deporte es mucho más profesionalizado, manejan mejor la disciplina. Sin embargo, creo que con los años se han formado técnicos potentes en Chile, sobre todo en regiones y es importante potenciarlos, y darles las oportunidades que necesitan para seguir creciendo. La preparación no sólo debe ser técnica, sino de gestión y psicología, lo que hace que el deporte se trabaje de manera más global. Hay que darles espacio a las nuevas metodologías y sobre todo si vienen de gente nacional”.
Independiente de si un proceso lo encabeza un nacional o un extranjero, lo cierto es que nada garantiza resultados positivos. “Igual esto puede ser a veces una lotería, pues así como puedes contratar a un muy buen profesional, que produzca el efecto que están buscando con su llegada, también te puedes equivocar. El papel, el currículum aguanta mucha información, pero la realidad puede que sea distinta, a partir de varios factores. En Chile, el deporte al no estar tan desarrollado, extranjeros que llegan a hacerse cargo o dirigir enfrentan un escenario diferente, con recursos limitados, otra idiosincrasia, lo que afecta para llevar a cabo un proyecto.
Traer un extranjero no es garantía de éxito, y la razón por la cual se buscan más creo que va por el desarrollo mayor que hay en algunos países sudamericanos”, señaló Daniel Romo, técnico de Old John’s.
En su formación, se asegura que los extranjeros sacan ventaja. “La carrera de entrenadores en Chile, en algunas disciplinas, está en pañales. Si quieres apuntar a algo más debes especializarte afuera sí o sí y muchos lo están haciendo. En Chile hay muy buen material, en cuanto a profesores, pero deberían entregarle la especialización acá mismo. ¿Por qué no? En Europa llevan muchísimos años trabajando con un sistema ya probado y acá es como si recién lo estuviéramos conociendo. Allá tienen el camino asfaltado para cuando llegan los niños y jóvenes a trabajar, acá se empezó desde nada y somos la primera generación que trabajó desde las bases con Bienvenido. Transmitirnos su experiencia ha sido vital”, dijo Felipe Cárdenas.
Sobre lo mismo, Evelyn Bastidas afirmó que “puede ser que haya una sobrevaloración del que viene de afuera, pero tampoco se puede desconocer que varios han logrado resultados muy importantes y han aportado mucho en el desarrollo de algunas disciplinas. El Estado igual debe invertir en preparar a los profesionales chilenos. Afuera hay un desarrollo mucho mayor, y por lógica los entrenadores se forman de manera más completa. Acá no hay muchas instancias, se podrían generar más o brindar becas asociadas al alto rendimiento, donde un magíster puede salir tres, cuatro millones de pesos. Eso es clave”.
Margarita Masías indicó que “no podría opinar de otras disciplinas porque cada cual es una realidad distinta, pero creo que debemos especializar a los entrenadores acá. En Chile existe la Enea, que es la Escuela Nacional de Entrenadores de Atletismo. Yo también he dado clases, me he metido mucho en el deporte escolar, en sacar nuevos talentos. Hay que desarrollar esa formación de entrenadores”.
Daniel Romo señaló que “desde lo personal, creo que culturalmente en Chile está establecido eso de que ‘el pasto del vecino siempre es más verde’. Esto se extrapola a temas laborales o profesionales, pues si miras distintas compañías, más allá del deporte, en cargos gerenciales o de directorio hay personas extranjeras, que seguramente están bien capacitadas. Particularmente en el tema deportivo, pasa a nivel sudamericano, que se entiende que hay países más desarrollados que nosotros, y por eso en la búsqueda de ese crecimiento se sale a buscar entrenadores foráneos”.
Otro tema planteado fue si se evalúa de forma diferente a un extranjero que a un nacional. En el fútbol, Víctor Merello afirmó que “al técnico chileno le das tres o cuatro partidos y si le va mal lo sacan. Se le respeta menos que al extranjero. Hace mucho no tenemos un chileno en la selección, pese a que en su momento Mario Salas o el Coto Sierra hicieron méritos suficientes, pero se confió más en gente de afuera, no con más pergaminos ni muchos más títulos. Hay gente que se pregunta por qué Pellegrini no viene a la selección. Simple, porque sabe cómo funcionan las cosas acá: pierde tres partidos y ya lo van a querer echar. El equipo que mejor juega hoy es Ñublense, pero seguro que muchos dirán que lo de Jaime García es porque se le dio, que pasa por una buena racha… Va a salir campeón y no lo van a pescar. Porque es humilde, se preocupa de trabajar. Acá todo lo mueven los representantes, hace rato”.
Por su parte, Daniel Romo comentó que “creo que lo que se evalúa es el proyecto deportivo, entonces si el proyecto que se le presenta a un extranjero es ambicioso, habrá que medirlo con esa vara. Si a un nacional se le presenta una propuesta más pequeña, con otras metas, se le pedirán resultados en esa línea. No creo que varíe la evaluación por ser chileno o extranjero, sino que por los objetivos o metas que se planteen como parte del proceso”.
Desde la psicología, Alexi Ponce, director de Go Focus, indicó que “siempre a la persona que viene de afuera se le espera más o se le dan más posibilidades que a los nuestros. En Chile hay personas muy preparadas, muy bien formadas, pero que a veces no tienen una oportunidad. Y cuando la tienen, deben aprovecharla bien porque no los esperan lo mismo”.
En ese sentido, también agregó que “pudiese haber una valoración inicial mejor hacia el extranjero por tener otro idioma, otro acento, otra cultura. Además, es gente que viene muy dedicada a sacar una tarea específica en el deporte. Un entrenador nacional lógicamente tiene preocupaciones cotidianas, familiares, personales que a veces están muy presentes (…)El extranjero sí o sí, para sostener su estadía en el país, debe tener resultados y todo su enfoque va para allá, y exigirá en esa línea. El técnico nacional, al conocer la idiosincrasia, la cultura, tiene más posibilidades que el deportista se vaya adaptando quizás de otra manera. Igual, a gente de afuera le va mal, no te garantiza éxito”.