Campanil venció con claridad a Las Ánimas por 81-57, en un encuentro que dominó de principio a fin. Mañana, desde las 22.30 horas, buscará otra corona.
Varias interrogantes planteaba el debut de Basket UdeC en la nueva temporada del cesto chileno. Que si mantendría el nivel, que si le iba a pesar la inactividad o la falta de juego. Todas dudas que el elenco de Cipriano Núñez despejó con contundencia en Puerto Varas, donde se impuso con claridad a Las Ánimas y avanzó a la final de la supercopa.
El inicio del encuentro fue muy positivo para el Campanil. Se notaba un equipo con confianza, con el aplomo que le dio su reciente título de la Liga Nacional. Con un Silva muy activo -le hizo bien su nueva convocatoria a la selección- y Milano dominando los tableros, tomó ventaja de 11-5. En ese periodo, mostró fluidez ofensiva y hubo una jugada para el recuerdo, con un pase entre las piernas de Silva para que Milano anotara dos puntos. Las Ánimas tenía problemas para llegar al aro, producto de la buena defensa del elenco de Cipriano Núñez.
La UdeC siguió manejando el trámite, y a excepción de Sáez -igual fue valioso su aporte en defensa y reboteando- anotaron todos sus titulares en el primer cuarto.Sobre el cierre, Las Ánimas acortó distancias con un triple de Low, que puso el marcador 19-13. Una diferencia que no reflejó la superioridad del Campanil en el juego.
Arteaga abrió el segundo cuarto con un triple, y Milano seguía dominando la pintura. El dominio delCampanil se afianzó aun más con dos triples seguidos de Arteaga, que pusieron la cuenta 30-16 con poco más de seis minutos por jugar en el parcial. Cipriano Núñez hizo cambios tomando en cuenta la ventaja, y el equipo mantenía su fisonomía, con prolijidad en ataque -algunos errores de Madera- y mucha intensidad en defensa. Carrasco un triple, en un momento en que Las Ánimas mostraba algo de fluidez en ataque, y dejó las cosas 36-22 para la UdeC.
Un parcial de 5-0 acercó al conjunto valdiviano, pero un triple de Rivera sobre la chicharra dejó un marcador más acorde a lo visto en la cancha: 41-30 para el Campanil.
El tercer cuarto empezó con un Milano tan dominante como en el primer tiempo, y los cuatro puntos que anotó al inicio del parcial le dieron una ventaja de 15 puntos a su equipo (45-30). Un doble de Carrasco y otro de Sáez, tras gran asistencia de Silva, ampliaron aún más la ventaja ante un rival que se veía muy errático en ambos costados.
Cuando quedaban cinco minutos del cuarto Las Ánimas aún no anotaba ni un solo punto, racha que cortó un doble de Naranjo, pero la UdeC no daba tregua y lideraba por 56-32 en ese punto. En ese momento, también ingresó a la cancha Kevin Rubio, que hizo su estreno con la camiseta auricielo y aportó con un doble sobre el final del tercer cuarto, que terminó 60-39 para el campeón de la Liga Nacional.
Con el encuentro ya definido, el último cuarto fue una formalidad, aunque la UdeC estuvo lejos de bajar el ritmo y la intensidad. Un nuevo triple de Arteaga puso la cuenta 70-42 con poco más de seis minutos por jugar.Los ingresos de Alvarado y Domínguez reconfirmaron que el duelo estaba más que cerrado, y le permitieron a la UdeC descansar a sus principales nombres. Al final, el duelo terminó 81-57, con los 12 jugadores del Campanil anotando al menos un doble. Mañana, irá por otro título. Algo que ya se está haciendo costumbre.