El intenso calendario de partidos y un clima que no afloja atentan contra el delicado estado del campo de juego de Collao, que lució una gran mancha café el fin de semana.
Una mancha gigante de “barro” claramente no pasó desapercibida en los últimos partidos en el Ester Roa. ¿Qué pasó? El administrador del recinto, Eric Tillería, explicó a Diario Concepción que “se jugaron muchos partidos en un período muy corto de tiempo en medio de un temporal. La cancha no se pudo recuperar entre un partido y otro. En situaciones así, lo recomendable hubiese sido jugar, con suerte, dos partidos a la semana”.
El problema es que en medio de torrenciales lluvias en el pasto del Ester Roa se jugaron cuatro duelos entre jueves y domingo, incluso hubo dos en un mismo día. “Eso no es normal ni en la temporada de primavera-verano. La intención de parte nuestra es no dejar a nadie sin ocupar la cancha, por lo que nos pasó la cuenta, como siempre, el tener disponible el recinto para los equipos de la zona”, complementó Tillería.
Muy por el contrario a lo que se pudiese pensar, la mancha café del medio de la cancha no es de barro. Al respecto, el administrador del estadio, explicó que “la cancha no tiene tierra. Lo que se ve arriba es una capa de pasto en proceso de descomposición con agua. Ninguna capa tiene tierra, sino que arena negra de río con una granulometría específica. Y abajo de eso hay gravilla, que es la que llega al drenaje”. Así, entonces, el thatch (capa vegetal en proceso de descomposición) es lo que se aprecia como una gigante mancha café desde arriba del Ester Roa. “El pasto está debajo de esa capa color café. No es que ese espacio esté pelado, sólo que el pasto no alcanzó a recuperarse. El domingo se veía feo, pero lo peor fue cuando se jugó lloviendo el sábado. Por lo menos con toda la lluvia, nunca hubo pozas de agua en la cancha”, añadió Tillería.
¿Cuánto falta para que el Ester Roa vuelva nuevamente a lucir un pasto acorde al mejor estadio de Chile? El administrador del recinto comentó que “no hay cancha que se pueda recuperar en dos o tres días. Visiblemente puede llegar un poco mejor al próximo partido, pero en cinco minutos se hará pedazos. Lo que se está haciendo es generar que ese compuesto que parece barro, baje y sea absorbido por la arena. Así, la idea es que el pasto que está abajo se pare y no se pudra. Por eso se riega. Ese proceso tiene algo en contra, porque al mojar tanto la cancha, se pone blanda. Y además, vienen dos partidos este viernes y el sábado. Esa es una complicación”.
En ese sentido, el calendario no ayuda a una pronta recuperación de la cancha, considerando que tras los duelos de UdeC vs Santa Cruz y Deportes Concepcion vs Lautaro de Buin a disputarse este viernes y sábado, cada uno, en el Ester Roa se jugarán cuatro duelos más desde el próximo miércoles al lunes. “Los clubes están preocupados y muy al tanto de esta situación. Saben que no podrán jugar fútbol a ras de piso ni ser tácticos. El Vial lo hizo bien el otro día. Lo sicológico, la garra y el físico serán vitales”, cerró Tillería.