Lesión de Gutiérrez en el primer tiempo y expulsión de Palmezano en el segundo, condicionaron al acero, ante un rival que no supo sacar diferencias con uno más.
Huachipato salió a su primer duelo como local de la temporada buscando repetir lo de 2020, donde fue el mejor dueño de casa y sumó cuatro victorias seguidas al cierre del certamen. Sin embargo, ayer terminó igualando sin goles con Cobresal, en un punto que aparece como positivo dado el trámite que tuvo el encuentro.
El inicio del partido fue de mucha imprecisión, aunque con un leve predominio del local, sobre todo cuando apretaba bien arriba la salida de los nortinos. Las mejores aproximaciones acereras fueron entre los 15 y 20 minutos, con un disparo de Palmezano desviado desde la entrada del área, otro de Poblete y un cabezazo de Mazzantti que atrapó bien Requena.
Pasada la media hora, vino la primera jugada que cambió el trámite del duelo. Gutiérrez salió lesionado, y Luvera optó por meter a Garrido al medio y mandar a Poblete, de gran incidencia ofensiva hasta ese momento, al lateral derecho. Ahí, Cobresal empezó a tener chances claras, como la de Salinas a los 38’, que desvió tras excelente pase de Pol, y una del propio “9”, que mandó un taconazo al palo.
En el segundo tiempo, el ingreso de Ragusa le dio más fútbol a Cobresal, que se adueñó de la pelota. Sin embargo, a los 53’ Baeza pudo abrir la cuenta, con un remate que controló bien Requena. Tras cartón, centro de Mesías y Salinas desvió solo desde casi el punto penal.
A los 60’, hubo un gol anulado Mazzantti por offside bien cuestionable, y cinco más tarde Palmezano vio la roja directa por pisotón contra Reynero. Interpretable expulsión, pues bien pudo ser sólo amarilla.
De ahí en más, la visita controló el trámite, pero sin generarse opciones claras. Huachipato se replegó bien y rescató un positivo punto por cómo se dio el encuentro.