Si bien para muchas disciplinas no existe mayor claridad sobre el regreso, lo cierto es que para varios, que pueden considerarse como menos masivos, desde el punto de vista mediático, y con menos recursos, la situación es todavía más compleja. En el vóleibol, el patinaje, el rugby y el balonmano, por mencionar algunos casos, la incertidumbre sanitaria y lo mencionado anteriormente atentan contra una proyección.
El fútbol profesional chileno está pronto a cumplir dos meses desde su regreso. En el básquetbol, ya hay fecha de retorno para la Liga Nacional. Los atletas de alto rendimiento también llevan tiempo preparándose para sus diferentes desafíos. Un panorama que contrasta con otros deportes, que podrían considerarse como menos masivos, menos mediáticos, donde no existe una presión social que acelere la vuelta.
Disciplinas como el patinaje, el balonmano, el vóleibol o el rugby no proyectan un regreso pronto. Y es que volver con todos los protocolos correspondientes, que implican exámenes PCR de manera periódica y sanitización constante, por nombrar dos aspectos, implica invertir recursos. Dineros que, por lo general, siempre escasean en este tipo de deportes.
Benhur Ormeño es DT de Agruvol y, además, trabaja en el Departamento de Educación de Lota, con talleres de vóleibol. En su caso, asegura que todo posible regreso está condicionado a lo que determinen las autoridades sanitarias y, también, a la situación particular que vive su comuna.
“En el vóleibol de Chile nos regimos por la Federación, que ha estado en constante comunicación con la ministra del Deporte y el Ministerio de Salud para ver los protocolos y ya pensando en el 2021 a esta altura. De acuerdo a los avances que tengan con ellos, automáticamente, se nos abre las posibilidades a nosotros los de regiones”, indicó.
En esa línea, agregó que “por lo mismo, en febrero del 2021 como Agruvol Lota tenemos la fecha del beach voley en Colcura. Estamos esperando los avances y protocolos con los entes mencionados anteriormente. Viéndolo netamente del punto de vista de nuestra disciplina, que no tiene contacto físico como otros deportes, en ese sentido tenemos cosas a favor de acuerdo a los protocolos e, incluso, se está pensando en el saludo con el pie y no con la mano. De todas maneras nosotros estamos planificando nuestras actividades para el año 2021 con nuestro campeonato beach voley e indoor (gimnasio)”.
Más allá de eso, Ormeño tiene claro que las restricciones sanitarias tienen un mayor peso en deportes como el vóleibol. “Obvio que sí, por eso estamos a la espera la evolución de la pandemia. Como dije antes, nosotros nos regimos por la Federación, ellos marcan la pauta. Si no los autorizan a ellos con sus campeonatos nacionales o sudamericanos menos habrá permiso para nosotros”.
Paulina Moscoso es entrenadora de patinaje artístico y comentó que “por lo que sé, las clases en los clubes se están haciendo online, y no hay un retorno programado a corto plazo. En Santiago, ya se está practicando en algunas instituciones, pero con pocas niñas, con mascarilla y en lugares abiertos”.
Al respecto, agregó que “ahora que se levantaron las cuarentenas en varias comunas de la Región, es probable que se retome la actividad, tal como en Santiago. Será en grupos, con pocas niñas y en espacios abiertos. Antes, en cancha, podían haber 12, 13 niñas, ahora serán seis y todas con mascarilla”.
De igual manera, reconoce que para disciplinas como el patinaje es más complejo, por temas como los costos de sanitización y otros derivados de los protocolos sanitarios. “Sí, es más difícil, pero en Santiago todos los clubes están entrenando en canchas abiertas. Acá se necesitarían espacios al aire libre, pero acá todos practican en canchas cerradas por el clima, pues llueve más que en el centro del país. Lo ideal sería hacerlo con número reducido y en lugares así”.
En ese sentido, agregó que “el patinaje, de por sí, es un deporte caro. Sus implementos, hay que viajar harto, perfeccionarse, las clases no son baratas, el vestuario. También hacerse socio de un club implica recursos. A pesar que no es una disciplina tan mediática y los recursos los ponen los propios deportistas y sus familias, se puede ver algo favorable, que se puede practicar de forma individual, y eso permite que se pueda retomar el entrenamiento con pocas niñas y distanciamiento”.
Daniel Romo, entrenador de Old John’s, afirmó que en el caso del rugby “personalmente, creo que hoy en día hay que anteponer la salud de todos, la posibilidad de evitar cualquier contagio, por sobre los intereses deportivos. Hay que pensar que al inicio de la pandemia, ciudades como Concepción o San Pedro de la Paz tenían las condiciones sanitarias para mantenerse en la actividad, pues en esa fecha no existían protocolos. Las medidas fueron parejas para todos, tomando como medida lo que pasaba en Santiago principalmente”.
Al respecto, agregó, “pienso que no se puede forzar un sistema. Se debe anteponer el bienestar de las personas, de todos quienes están alrededor del deporte. Este año, ya no habrá competencias en el rugby, es imposible que se haga. Los clubes en Santiago recién están retomando la parte física, y para las instituciones de la Región será aún más difícil. En este momento, el bien superior es la salud, y hay que centrarse en eso más allá del deporte”.
Patricio Polic es entrenador de balonmano de la Ucsc y del club Vieux Gaulois. “Lamentablemente, en la provincia estuvimos mucho tiempo en cuarentena, y ahora que pasamos a fase 2 se puede intentar volver al menos al aire libre. Eso dependerá de la disponibilidad y actualidad de cada club para poder trabajar. Además, hay que estar atentos a los parámetros que determine el Ministerio de Salud para hacer deporte”.
Sobre lo anterior, advierte que también hay que estar atentos a experiencias de otras países, como lo que ocurrió recientemente en España. “Hace unos días, se disputó un partido donde todos los jugadores utilizaron mascarilla y fue muy complicado. Tuvieron problemas respiratorios durante el encuentro, no fue una buena decisión. Entonces, acá hay que esperar hasta que existan mejores condiciones para volver a practicar, pues el retorno al juego será más complicado”.
Polic, sobre lo anterior, también recalca que el tema de los protocolos sanitarios también genera restricciones pensando en el retorno, sobre todo apuntando a la vuelta de la competencia.
“En España, los jugadores se hacen PCR cada semana, después de jugar y a los dos días después de un partido. Es como lo que pasa acá con el fútbol profesional, donde también los instructores nos hacemos PCR todas las semanas, partido a partido y 48 horas antes para descartar cualquier contagio. Esa posibilidad no la tenemos los clubes amateur, una opción de traer test para empezar a entrenar o jugar de manera más pronta. Mientras tanto, sólo podemos proyectar retomar las prácticas al aire libre, siempre y cuando lo permitan las disposiciones sanitarias”.
El también ex árbitro de fútbol comentó que “vemos cómo se ha desarrollado el balonmano en el ámbito profesional en otros países, lo mismo que otras disciplinas, y es porque los costos pueden ser cubiertos por los recursos que genera cada deporte, para hacer los PCR, medidas de protección necesarias, cada deportista cuenta con sus elementos personales de higiene, para entrenar y jugar. Eso no pasa en el ámbito amateur, aunque yo creo que sí se puede, tenemos que adaptarnos. De hecho, los clubes en Santiago que están en fase 3 ya están trabajando, y cuando pasemos acá se podrá hacer igual, en espacios abiertos, con grupos reducidos, teniendo alcohol gel, mascarilla y distanciamiento social”.
En ese sentido, también añadió que “al principio, había ganas de entrenar por Zoom, pero eso ha ido decayendo con el paso del tiempo. Entonces, es complejo. El balonmano, por las características de la Región, se entrena gran parte del tiempo en espacios cerrados, pero en este momento sí se podría retomar en lugares abiertos. Dar ese paso, cuando se pueda, sería de gran ayuda para todos”.