Deportes

¿Nueva Constitución? Esto queremos para el deporte

Tras el acuerdo histórico de la mayoría de los partidos políticos para redactar una nueva Carta Magna en Chile, la actividad física busca su lugar en el que se le dé la importancia que amerita.

Por: Samuel Esparza 25 de Noviembre 2019
Fotografía: Andrés Oreña P.

Chile es uno de los países donde la legislación respecto al deporte está dispersa en cuerpos normativos: Código Civil y otros códigos, como el Penal y el Laboral, además de varias leyes, como la ley 19.327 (derechos y deberes de los asistentes y de los organizadores de espectáculos de fútbol profesional); 20.178 (relación laboral de los deportistas profesionales y trabajadores que desempeñan actividades conexas), y 20.019 (sociedades anónimas deportivas profesionales).

La intervención más relevante es la Ley N° 19.712 o “Ley del Deporte”, cuerpo normativo con la misión de modernizar la regulación de la actividad deportiva en Chile, fomentando su desarrollo. El texto legal parte definiendo qué se entiende por deporte, señalando que es “aquella forma de actividad física que utiliza la motricidad humana como medio de desarrollo integral de las personas, y cualquier manifestación educativo-física, general o especial, realizada a través de la participación masiva, orientada a la integración social, al desarrollo comunitario, al cuidado o recuperación de su salud y a la recreación”.

Fue publicada en 2001, siendo su última modificación el 16 de diciembre de 2016. Además, reconoce como deber del Estado, “el crear las condiciones necesarias para el ejercicio, fomento, protección y desarrollo de las actividades físicas y deportivas, estableciendo una política nacional del deporte orientada a tales objetivos”.

El 28 de agosto de 2013 se publicó la Ley N° 20.686 que marcó un hito en la materia, creando el Ministerio del Deporte, órgano superior de colaboración del Presidente de la República en materias referidas a la Política Nacional del Deporte, teniendo como misión contribuir a desarrollar una cultura deportiva a través del diseño y ejecución de la política nacional de actividad física y deporte.

Es así, que se originó una Política Nacional de Actividad Física y Deporte 2016-2025 que reconoce al Estado como un actor primordial en la promoción de hábitos de vida saludable en la población.

El reconocimiento como derechos fundamentales de la actividad física y el deporte y su relevancia en el desarrollo de las personas, tiene sustento a nivel internacional en la Carta Europea del Deporte de 1992, la Declaración de Brighton de 1994, el Consejo Europeo de Niza de 2000, la Carta de Toronto para la Promoción de la Educación Física de 2010, la Declaración de Berlín de 2013, y la Carta Internacional de la Educación Física, Actividad Física y el Deporte de 2015.

Modelos internacionales

Lo anterior, es analizado en la tesis de grado de la Universidad de Chile publicada en 2011, “El derecho al deporte en Chile: Fundamentos y antecedentes para su consagración constitucional”, realizada por Martín Serrano Lucero.

En el trabajo se menciona que, “en el último tiempo, se ha visto una tendencia de las naciones a incorporar a sus respectivas constituciones la actividad deportiva, en algunos casos hablando de éste como un derecho fundamental”. Así, se enumeran una serie de casos:

La Constitución de Portugal, señala que “el Estado reconoce el derecho de los ciudadanos a la cultura física y al deporte, como medios de promoción humana y le corresponde promover, estimular y orientar la práctica y difusión de los mismos”.

España, en su constitución de 1978, eleva el deporte al más alto rango normativo, señalando que, “los poderes públicos fomentarán la educación sanitaria, la educación física y el deporte”.

México dictamina que “toda persona tiene derecho a la cultura física y práctica del deporte. Corresponde al Estado su promoción, fomento y estímulo”.

La constitución griega, de 1975, fue la primera del mundo occidental que se refirió al hecho deportivo, disponiendo que, “los deportes quedan bajo la protección y alta vigilancia del Estado que subvencionará y supervisará las uniones y asociaciones deportivas de toda clase”.

La constitución de Paraguay dice que, “el Estado promoverá los deportes, en especial los no profesionales, que estimulen la educación física, con apoyo económico”.

En el caso de Brasil, en uno de sus capítulos, su constitución se dedica al deporte. “Es deber del Estado fomentar las prácticas deportivas formales y no formales, como derecho de cada uno, observando la autonomía de las entidades deportivas y de las asociaciones, el destino de los recursos públicos a la promoción prioritaria del deporte escolar y para el deporte de alta competición”.

Y la constitución colombiana reconoce este derecho expresando que, “se reconoce el derecho de todas las personas a la recreación, a la práctica del deporte y el aprovechamiento del tiempo libre. El Estado fomentará estas actividades”.

Según la tesis, se deduce que, “en esos países, la práctica deportiva es percibida como un pilar de la prosperidad y por eso sus respectivos gobiernos han asumido un compromiso mayor con extenderla”.

Caso chileno

No sucede lo mismo en Chile, donde son comparativamente pocas las personas que comprenden la trascendencia del deporte, además de haber escasez de políticas públicas.

Así, por ejemplo, la Encuesta Nacional de Hábitos de Actividad Física y Deporte de 2018, determinó que un 81,3% de los chilenos son inactivos físicamente, y que 8 de cada 10 chilenos no practican actividad física ni deportiva según recomendaciones de la OMS, siendo los niveles de inactividad física “significativamente mayores en grupos de menores ingresos”.

De igual manera, la última Encuesta Nacional de Salud (2016-2017) diagnosticó un dramático aumento de la obesidad, que creció de 22,9 a 31,2% respecto a la encuesta 2003.

Pese a lo anterior, el deporte no está consagrado expresamente en nuestra Carta Fundamental ni en el extenso catálogo del artículo 19, ni en otra de sus partes, y la única alusión al hecho deportivo es más bien tangencial (según Serrano), encontrándola en el artículo 118 que, a propósito de las municipalidades, señala que, “éstas podrán, para el cumplimiento de sus fines y con el objeto de promover y difundir el arte, la cultura y el deporte, construir o integrar corporaciones o fundaciones de derecho privado sin fines de lucro”.

¿Qué queremos para el deporte?

El pasado 15 de noviembre, en un hecho histórico, la mayoría de los partidos políticos que tienen representación en el Congreso llegaron a un acuerdo para iniciar un proceso constituyente que permitirá redactar una nueva Constitución para Chile.

En el caso del deporte, se abre también una oportunidad para que sea considerada con la relevancia que merece en la nueva Carta Fundamental. De ahí que un grupo de deportistas y entrenadores locales hablaron de lo que les gustaría contenga la nueva Constitución en Chile, coincidiendo en que el deporte debe ser un derecho.

“Me gustaría que existieran nuevas políticas que amparen mejor a los clubes, asociaciones y federaciones deportivas, para dar más acceso a las personas para iniciarse en el deporte que quieran, no el que puedan. Profesionalizar el deporte para que los deportistas puedan desarrollarse y representar al país sin problema. Y por supuesto, que se incluya a la empresa privada no sólo a través de proyectos de ley de donaciones”, sostiene la campeona nacional de los 3.000 metros planos, Margarita Masías.

Francisco Barrera, medallista panamericano de halterofilia, expresó que, “si se agregara a la Constitución, me gustaría que los deportistas de provincias tengan oportunidad de desarrollarse en su propia región. En las pesas, los chicos Sub 17 y juveniles que concentran en Santiago con la selección reciben dinero, pero también hay deportistas de regiones a veces más talentosos, pero por el hecho de no estar allá, no se les apoya económicamente. De manera constitucional, debería propiciarse que las regiones tengan un desarrollo en infraestructura y los deportistas puedan desenvolverse de manera profesional en sus regiones. Yo que estoy de DT en Santiago, creo que es clave”, expresa.

Otro punto relevante, a juicio de “Pitbull”, es que el deportista tenga un ingreso fijo. “Ser seleccionado nacional debería dar derecho a un ingreso equivalente, al menos, al sueldo mínimo, no depender de un panel técnico de metodólogos que no es especialista. Y una vez que sean top que pasen al Proddar, que también debería mejorar en los niveles más bajos”, cierra.

El atleta coronelino, Rafael Muñoz, también plantea su punto de vista. “Creo que hay dos puntos claves sobre el alto rendimiento. En lo particular tuve un tema con el Proddar cuando fui oro en el Iberoamericano de Trujillo, ya que por la baja de otros países en mi prueba, no fue aprobado por el comité. Al igual que en el Sudamericano Sub 23, la ley tampoco contempla para las futuros talentos que pueda tener el país, sólo a los medallas de oro y plata en un Sudamericano. Y para llegar a eso, se necesita antes de apoyo económico. Para el Panamericano de Lima, a todos los peruanos medallistas les regalaron un departamento, hay conciencia de que los deportistas tienen un futuro por el cual velar. Lo otro que debería insertarse en la Constitución, es la carga académica en las universidades a los deportistas de elite”, cierra.

“En primer lugar, sería demasiado bueno que el deporte sea un derecho constitucional”, parte diciendo el ex campeón panamericano de salto largo, Daniel Pineda. “Estamos hablando de un paso gigante en pro de la salud de cada chileno el que tenga opciones de realizar actividad física sin trabas. En el caso hipotético que sea parte de la nueva Constitución, según mi experiencia, el Estado debería asumir obligaciones en cuanto a promover el deporte recreativo-formativo hasta asegurar el desarrollo de los grandes talentos en alto rendimiento”.

La campeona mundial de canotaje, María José Mailliard, tiene una mirada clara al respecto. “Primero, que el deporte sea una prioridad atendiendo a que somos un país con altos niveles de obesidad. También profesionalizar el deporte en Chile, que uno se pueda dedicar 100% sin tener la incertidumbre de qué haremos el día del retiro. En países como Hungría, los medallistas mundiales y finalistas olímpicos tienen sueldo de por vida (desde 2.000 a 3.000 euros mensuales), incentivo para que los padres de los niños que hacen deporte los apoyen a ser profesionales”, estima.

Y agrega, “eso traería no tan solo una mejora en el deporte nacional, sino también repercusiones en la salud, habría menos drogadicción, gente más pro-activa, con metas, porque los deportistas son personas que desde pequeños aprenden a ser estructurados. Hay países que contratan a ex deportistas en sus empresas por lo mismo. Somos un porcentaje muy mínimo de deportistas y realmente damos toda nuestra vida por representar a Chile. En mi caso, compito desde los 6 años y hoy tengo 28, es toda una vida en donde dejé todo de lado, incluso mis estudios, para ser la primera mujer canoísta clasificada a unos Juegos Olímpicos en la historia de Chile, y la única medallista mundial del país. Pero tengo mucha incertidumbre de qué va a pasar conmigo después del deporte”, reconoce.

Mauricio Orrego, reciente medallista de oro en los Juegos Parapanamericanos de Lima, aporta que “pondría como obligación tener ministros que hayan practicado la labor de dicho ministerio. Encuentro pésimo que una persona que no tiene idea de lo que es ser deportista esté en el cargo, más si debe tratar con deportistas que no cuentan con medios para desarrollarse. Lógicamente la nueva ministra del Deporte no me representa ¿Por qué se exige que el ministro de Salud sea médico y acá no que sea deportista?”.

Para Judith Torres, ex seleccionada nacional y destacada rugbista de la UdeC, el tema es de suma relevancia. “La actividad física y el deporte juegan un papel importante a escala individual, comunitaria, nacional y mundial, es por esto que la nueva Constitución debería considerar estos conceptos como derecho fundamental. Contribuiría a la economía y el crecimiento social, mejoraría la salud y bienestar público y uniría a las diferentes comunidades del país”, indica.

La campeona nacional de los 1.500 metros planos, Javiera Faletto, añade que, “son muchas cosas que los deportistas necesitan, pero sobre todo apoyo desde lo formativo, apostar por deportistas que puedan llegar alto, y no que un deportista en potencia llegue a la universidad y ‘muera’; ahí entran las políticas de las universidades para apoyar. La nueva Constitución debería hacer que de alguna manera, a un deportista que entregó toda su juventud a representar al país, dejando todo de lado, se le asegure un futuro, y que el sistema Proddar esté mejor formulado”, advierte.

Mientras, el seleccionado nacional de remo, Felipe Cárdenas, precisa que, “(necesitamos por Constitución) que haya un apoyo constante a los deportes y que no sea variable el monto ya que todos los años cambia y piden resultados”.

Finalmente, la nadadora paralímpica, Macarena Quero, argumenta que, “en la Constitución no aparece el deporte y la recreación como un derecho constitucional, como en otros países, Chile aún está al debe. Hace tiempo que estamos hablando del tema y este es el momento para agregar al deporte en la Constitución, para que sea un derecho constitucional que el Estado fomente y preserve. Esto permitiría modificar ciertas leyes y políticas para personas en situación de discapacidad a nivel escolar y social”, sentencia.

Los entrenadores dicen

A lo anterior se sumaron voces de reputados técnicos locales, como Guillermo Jiménez (vóleibol UdeC), quien respondió que, “entiendo que el concepto ‘deporte’ no está descrito en la Constitución, lo cual me parece lamentable ya que debería ser un derecho constitucional para todas las personas. La nueva Carta Magna debería garantizar y proteger el derecho de todas las personas a realizar deporte de cualquier tipo (recreativo, formativo, profesional), y el derecho a la educación física (básico para el fomento del ejercicio y el deporte). Con estas incorporaciones se podrían generar nuevas leyes que fomenten el deporte, principalmente en niños, y así estructurar un plan de trabajo que genere más adolescentes dedicados al deporte. Y mejoraría el apoyo a deportistas de alta competición en sus procesos de preparación”, concluye.

Gualberto Mesa, entrenador del CER de Canotaje de San Pedro de la Paz, subrayó que, “pienso que el deporte es un derecho, que por cada mil pesos que el país gasta en deporte, se ahorra 3 o 4 mil pesos en salud pública. El deporte tiene varias miradas: formativa, alto rendimiento y salud, la única manera de tener un país sano; hay que hacer programas deportivos y el deporte definitivamente debe ser un derecho”, asegura.

“Se ha avanzado mucho, pero se puede hacer más esfuerzos estructurales, vincular la educación con el deporte es fundamental. Hoy la jornada escolar completa nos está matando, tenemos más niños obesos”, añade.

Finalmente, Daniel Camousseigt, técnico del CER de halterofilia de Concepción, opina que, “en algunos países tienen considerado el deporte como un derecho en sus constituciones, no así en Chile. Pero esto es como un director de cine que tiene un guion fantástico pero sin buenos actores, no funciona. Quiero decir que hay una cuestión estructural, lo hablaba con el diputado Tohá de que tenemos un problema serio con la jornada completa de estudios. Acá tengo chicos muy buenos pero que llegan tan agotados de clases que simplemente no pueden entrenar, no les dan las fuerzas. Por eso, por muy buena Constitución que tengamos, estas son trabas gigantes ya que no permiten un desarrollo deportivo”, se lamenta.

Y agrega, “lo mismo con el deporte universitario, mientras no haya un cambio radical para que los seleccionados tengan un currículo distinto, es imposible crecer. Hablando con entrenadores cubanos y colombianos, me contaban que en sus países en el deporte de alto rendimiento, los estudiantes sacaban las carreras en más años para garantizar un desarrollo deportivo top y, después, tienen una jubilación que les permite vivir tranquilos si se consagraron totalmente al deporte, a diferencia de Chile donde el exdeportista queda desamparado”.

Me parece bien que el deporte sea considerado un derecho en la Constitución, pero sin buenos actores, sin cambios de fondo, es letra muerta”, finaliza.

Ideas desde la gimnasia

Eric Saavedra, entrenador de gimnasia del Club GES, formuló un plan con otros técnicos:
-Mejoramiento de infraestructura de recintos deportivos.
-Plan nacional de inversiones que considere la construcción de centros deportivos en todo Chile.
-Plan nacional de inversiones de recuperación de espacios públicos. – Abrir instalaciones deportivas de las FFAA a la comunidad.
– Plan de inversión en material deportivo para centros deportivos del sector público.

Capacitación
– Fomentar capacitación de técnicos y profesionales en todo nivel.
– Pasantías en el extranjero a profesores con selecciones nacionales.
– Generar convenios de colaboración y transferencia de recursos con comunidades internacionales.
– Implementar en el currículum escolar mayor cantidad de horas para el deporte la recreación.

Desarrollo
– Generar plan nacional para actividades extraprogramáticas en edad temprana en las escuelas.
– Implementar en el currículum universitario el fomento deportivo con una orientación social.
– Potenciar la incorporación de actividades deportivas y vida sana que apunte a la familia a través de las municipalidades.
– Generar convenios de colaboración con Ministerio de Salud para hacer seguimiento deportivo y de salud a todos los deportistas.
– Mejoras salariales y contratos a profesores y técnicos que se dedican al deporte en materias indicadas en art. 4 de la ley del Deporte.

Financiamiento
– Mayor aporte de juego de azar.
– Mayor aporte privados.
– Potenciar la transferencia de recursos a las federaciones deportivas para acrecentar actividades a nivel nacional e internacional.

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