Deportes

El debate sobre el origen de los entrenadores ¿cómo se forman estos profesionales del deporte?

Por: Daniel Kuschel 18 de Septiembre 2017
Fotografía: Andrés Oreña P.

Son los encargados de formar a nuestros deportistas y gran parte de los logros que se obtienen es gracias a su trabajo. Pero su origen, formación y experiencia es siempre ámbito de interrogantes, más allá de los resultados que obtienen.

Hoy en día han crecido mucho las instancias que permiten a los entrenadores formarse oficialmente y optar a un título de técnico deportivo o entrenador, independiente de la disciplina que practique. Eso sí, uno de los principales requisitos es la motivación, porque estudiar requiere un esfuerzo importante en Chile.

Quizás la institución más establecida y con más notoriedad que hoy forma técnicos deportivos y entrenadores es el Instituto Nacional del Fútbol (Inaf), organismo que incluso mediante convenios ha establecido algunas sedes en regiones.

En la Región del Bío Bío, el Inaf mantiene una relación con la Universidad Técnica Federico Santa María, en cuya sede de Hualpén funciona este instituto profesional reconocido también por el Ministerio de Educación.

“El tiempo de trabajo de los jugadores es limitado, y a los 35 o 40 años ya quedan sin éste. Por ello, se generó esta opción para que pudieran prolongar su utilidad laboral siendo entrenadores”, explica Alejandro Aeloiza, jefe del Departamento de Educación Física y Deportes de la institución. “Les permite trabajar también en IND, colegios, universidades o escuelas de fútbol”, agrega.

La carrera cumple su tercer año en la zona, aunque este año no hubo nuevos ingresos. “La idea es que todos los que egresen tengan trabajo”, señala Aeloiza, sobre un proyecto que va por ciclos y que tendría nuevos alumnos en 2019, aunque con no más de 30 cupos.

Aquí el origen de quien postula si es proveniente del deporte o no tiene importancia, y como en toda carrera profesional, quienes tengan títulos previos relacionados con el área pueden convalidar ramos. En ese sentido, los profesores de Educación Física tienen ventaja, ya que pueden optar a un programa vespertino que copa toda la semana desde las seis de la tarde y se les reconoce algunas asignaturas.

También a la carrera pueden optar preparadores físicos de institutos profesionales, entre otros especialistas, aunque ellos deben hacer la malla completa.

Uno de los alumnos históricos del Inaf es el actual entrenador de la Universidad de Concepción, Francisco Bozán. El DT del Campanil pudo también tomar el curso Uefa Pro 3 en España en su perfeccionamiento, y siente que la distancia de conocimientos no es tanta.

“En la comparación en la entrega de conocimientos diría que el Inaf está bastante avanzado, lo consideraría entre los primeros de Sudamérica. Sí la diferencia está en el uso de las nuevas tecnologías y otros aspectos, y también en la experiencia de poder compartir con gente de renombre en el fútbol”, señala.

Otro de los aspectos que siempre es una interrogante es cuánto pesa la experiencia en el fútbol a la hora de formar entrenadores. “Adentro eso no se ve tanto, aunque yo jugué y decidí dedicarme a entrenar, no sé si mis compañeros lo habrán sentido mucho más. Eso es más afuera, porque está el nombre del que fue futbolística, el que ya es parte del fútbol, y los otros tienen que venir a hacerse parte de éste”, puntualiza Bozán, argumentando además que “al final la entrada puede ser antes, pero para mantenerse hay que mostrar resultados”.

En tanto, en el caso de los entrenadores extranjeros, se requiere una cantidad de requisitos para que puedan validar sus éxitos, experiencia o estudios en el país.

“Hay un programa especial que tiene la dirección de la carrera al que ellos deben someterse, para así tomar un examen de conocimientos relevantes. Tienen que dar charlas sobre un tema determinado”, comenta Alejandro Aeloiza al respecto, indicando también que “como en todas las carreras profesionales, siempre hay opción de que algunos tengan experiencias previas y se evalúen. El currículum que se da para esta carrera considera todos estos aspectos”.

Atletismo organizado

Es una de las disciplinas que más se ha desarrollado en el último tiem- po y la forma en cómo están gene- rando sus entrenadores puede ser una de las causas.

Hoy, la Federación Nacional de Atle- tismo tiene una Escuela Nacional de Entrenadores con distintos niveles, al igual que lo tienen organismos inter- nacionales.

“Antiguamente casi todos se forma- ban en el extranjero o en institutos de Educación Física. Después vino la IAF y se formó un Centro de Alto Rendi- miento en Argentina, especialmente para los países subdesarrollados”, re- cuerda Jorge Grosser, uno de los entre- nadores más destacados de la pista a nivel nacional, quien valora el actual organismo de formación de técnicos. “Es lo mejor que ha hecho la directiva actual de la federación”, sostiene.

En opinión de Grosser, la experien- cia previa marca una gran diferencia a la hora de adquirir los conocimien- tos para ser entrenador. “Los atletas y profesores de educación física tienen una gran parte avanzada porque ya tienen bastante de la teórica. Tienen que seguir capacitaciones para subir de nivel”, argumenta.

Además, Jorge Grosser ve motivación en los entrenadores nacionales. “La gente está bien interesada en aprender. Los entrenadores chilenos de hoy son muchos más preparados, porque es cosa de meterse a internet y encuentras información inmediatamente. Por eso, a veces otros no entienden como no tenemos un atletismo más desarrollado, y eso es por otros factores, como biotipo, el deporte de base que se da en los colegios, etc.”, indica.

Margarita Macías es atleta y también formadora de nuevos deportistas. Como profesora de Educación Física siempre ha tenido vocación de en- señar, y para ello se ha ido perfeccionando.

“En la carrera tú puedes elegir un deporte en el cual especializarte y yo escogí el atletismo. Además, hice un magíster en Actividad Física y Salud, y este año tomé un curso de la Federación Internacional de Atletismo que lo dictan cada cierto tiempo en Chile”, explica.

Ahora, para aspectos más específicos de su disciplina, tomó también este curso Nivel 1 de la IAF. “Tienes que postular y eligen a 20 personas que pueden tomarlo según currículum”, señala sobre el curso que le sirve para ser entrenadora en cualquier parte del mundo.

Hoy también hay otras opciones de perfeccionamiento, como cursos de niveles mayores y experiencias en el extranjero, aunque para Margarita Macías también falta un poco de apoyo mutuo entre técnicos.

“Falta también que los entrenadores se junten entre ellos a compartir experiencias, porque hay situaciones que a veces pasan y nadie te enseña a superarlas. No sé si será por tiempo u otra razón, en las ciudades falta compartir experiencias entre los técnicos”, sostiene.

Otro punto importante es la certificación, que quien te entrena tenga conocimientos al respecto. Así también lo manifiesta Margarita, hoy entrenadora del Taller de atletismo de Concepción, y también de los adultos de Talcahuano Runners. “Tiene que haber un poco de rigurosidad en quien entrena, no es sólo echar a correr a la gente”, indica.

Y en esa línea de las capacidades, ¿tienen más experiencia y conocimiento los entrenadores extranjeros? Para Jorge Grosser la respuesta es simple. “No hay entrenadores jóvenes o viejos, chilenos o extranjeros. Hay buenos y malos. A mí me gustan los entrenadores de afuera cuando aportan algo, por ejemplo, los rusos, esos trajeron conocimientos importantes, y más atrás varios otros”, indica.

Subiendo de categoría

Uno de los deportes que mejores resultados está teniendo en el último tiempo es la halterofilia, y es Daniel Camousseigt, profesor de Educación Física de la Universidad de Chile y actual entrenador de los pesistas en la zona quien indica cómo se forman los técnicos de esta disciplina.

“La halterofilia estaba ligado al atletismo, pero después llegó un profesor dictando cursos y me vinculé con ella, participando de los distintos cursos que daba la federación”, recuerda de sus inicios.

Hoy la federación tiene un programa de capacitación online, progresivo y de distintos niveles desde iniciación hasta profesional, con una instancia práctica en la que deben viajar a Santiago.

“Ha dado buenos resultados por las características del mismo, ya que de cualquier lado se puede acceder y formarse. Ha aumentado bastante la cantidad de técnicos”, indica Camousseigt en relación a esto.

En tanto, agrega en relación al perfeccionamiento posterior que “primero te lo va dando el día a día, la experiencia y la repetición, porque cada alumno es distinto y las adaptaciones que uno debe aplicar lo van dando los conocimientos prácticos. La técnica tiene que adaptarse al deportista, y eso es lo que hace la diferencia en un buen entrenador”, puntualiza, argumentando también que “se hacen cursos también para nivel avanzados, la federación tiene la capacidad para ello. El que quiera ir al extranjero lo puede hacer, pero acá en Chile tenemos las condiciones para mejorar”.

Por otra parte, al igual que ocurre en el atletismo. Camousseigt coincide en la opinión de su amigo Jorge Grosser respecto a la nacionalidad de los técnicos y su influencia en los resultados. “El hecho de ser extranjero o chileno no lo identifica profesionalmente, hay buenos y malos entrenadores. Acá han llegado con distintas características y resultados”, sostiene agregando un ejemplo. “Gualberto Mesa el entrenador de canotaje, con quien comparto el mismo lugar físico, ha tenido resultados notorios no teniendo las mismas condiciones que en Cuba, con temperaturas bajísimas en- tre otros aspectos. Los que yo he conocido han tenido buenos resultados y han aportado al crecimiento del deporte en Chile”.

Experiencias internacionales

Felipe Lazcano es periodista y hoy se encuentra radicado en Uruguay, realizando un curso de entrenador aprobado por la Fifa, la Conmebol y la Asociación Uruguaya de Fútbol, que consta de cuatro licencias, de las cuales, la primera, la C, ya la aprobó.

“La que ya aprobé es la que te habilita a dirigir el fútbol base, niños hasta 13 años. Acá en Uruguay -igual que en Argentina- es muy fuerte el baby fútbol. Así empiezan los niños, desde los 4-5 años, a jugar en la rama de Baby fútbol de cada club”, expresa.

Lazcano también valora la experiencia. “Ha sido muy buena, he tenido muy buenos profesores, de mucha experiencia, que es cuando más se aprende. Por ejemplo, Julio Gioscia (PF) que ha estado en la selección de Uruguay, Colombia, estuvo como 20 años en México y en miles de lugares. Ahora, por ejemplo, un ramo que se llama preparación física me lo está dando Andrés Barrios, que es el entrenador de los atletas olímpicos de Uruguay”, comenta.

Felipe agrega también que “en cuanto a fútbol, me hace clases Luis Matosas, quien dirigió también mucho tiempo. El próximo año voy a tener a Fabián Coito que es el actual DT de la sub 20 de Uruguay y así. La verdad es que sobre el nivel no me puedo quejar. No sé si será mejor o peor, más difícil o más fácil que en Chile, pero lo que más valoro es hacer algo diferente a los que estudian allá, y sobre todo, aprender de otra cultura futbolística que tiene mucha historia y éxitos a nivel fútbol. Por eso que elegí hacerlo fuera de Chile”.

Otro que entrega su experiencia formándose como entrenador en el extranjero es Leandro Mantello, actual técnico y jugador del hockey del Club Deportivo Alemán.

“Yo juego al hockey desde que tengo siete años, por lo que primero fui jugador, y de hecho lo sigo siendo. He hecho cursos en Argentina y hace más de 15 años que trabajo como entrenador”, indica.

Para Mantello no existe mucha diferencia respecto a quienes ya tienen experiencia en su deporte y quienes no. “Si no tienen pasado en un deporte y se preparan para ser entrenadores: en lo personal, creo que todo suma, y son perspectivas distintas. No es malo, pues a veces uno cuando ha jugado tiene otro tipo de cosas extra para saber y aportar, como el minuto a minuto en la cancha, manejar las pulsaciones, cómo enfrentar en momentos claves cuando conviertes o te hacen un gol. Son aspectos que los técnicos que no han practicado el deporte pueden conocer, pero no es lo mismo que vivirlo de adentro. Es como que tocan de oído”, explica.

En lo relacionado al perfecciona- miento del entrenador, Mantello apela a la gran cantidad de información existente actualmente. “Un mundo globalizado permite tener acceso a más herramientas para ir avanzando: hoy en día, cualquiera que se trate de capacitar y le ponga ganas al tema, puede ser entrenador. Con la cantidad de cosas que hay en internet puedes hacer cursos, leer, sacar entrenamientos”, explica.

En tanto, en el básquetbol de la Universidad de Concepción se rompen hoy esquemas. El uruguayo Santiago Gómez, con sólo 26 años, pasó de ayudante técnico a entrenador titular del plantel profesional, y cuenta también su experiencia de formación en su país de origen.

“En Uruguay existe la Escuela Nacional de Entrenadores, guiada y apoyada por el básquetbol vasco español, y que tiene cuatro niveles”, explica en relación a los que pueden ser realizados en tres años. “Tiene una fase interactiva y otra presencial, y los últimos tres meses tienes práctica profesional en un club”, agrega.

Los cursos se dictan todos los años, y en la parte presencial se dictan charlas de entrenadores importantes, que los estudiantes egresados pueden ver para generar perfeccionamiento, además de bastantes clínicas deportivas.

Para Gómez, la idea es que tam- bién en Chile puedan darse esas instancias de formación. “Lo importante es que sea constante y no charlas de dos días. Ha mejorado mucho la unión de todos los estamentos y eso también se está viendo reflejado en los resultados por ejemplo con los menores, así que hay que aprovechar para hacer todo este tipo de instancias”.

Etiquetas