Luego de un exitoso recorrido que incluyó visitar diferentes comunas -alejadas de las capitales regionales- el montaje dirigido por Lisette Navarratia pondrá el broche de oro hoy en Sala 100. Agendada para las 19.00 horas.
Con diez funciones gratuitas ya realizadas en comunas de Ñuble, Biobío y La Araucanía, la circulación de “Como un océano de fuego” llega a su etapa final, consolidando un proceso que permitió acercar la danza contemporánea a públicos de diversas latitudes de nuestro país. La obra, dirigida por la coreógrafa Lisette Navarratia en asociación con la Plataforma Lokas Juanas, ha circulado durante cuatro meses por teatros, centros culturales y espacios escénicos de distintos territorios no capitales de sus regiones, reafirmando la importancia de circular la danza por territorios diversos y abrir espacios de encuentro con la comunidad.
Fin del trayecto que tendrá como escenario este 13 de septiembre -a las 19.00 horas- a Sala 100 de Artistas del Acero (O”Higgins 1255), y próximamente a confirmar fecha en la comuna de Chiguayante.
“Esta itinerancia sólo refuerza la importancia que tiene el hecho de mover los trabajos que se van creando, en distintos lugares, moverlos a otros territorios del país y no solamente para el público, en este caso específico de la danza, sino que también al público general, a la gente”, comentó Navarratia.
En cuanto a la recepción de las diversas audiencias que han recibido la obra, la coreógrafa comentó que “creo que remueve los estómagos de la gente. Al parecer tiene una sensibilidad que atraviesa generaciones, experiencias, es algo bastante humano. Es significativo que se haya podido traspasar esa sensibilidad y esa profundidad que, de manera inconsciente tal vez, se plasma en estos cuerpos que la interpretan y que estas personas con otros estilos de vidas, de otros lugares, con edades distintas a las del equipo se hayan sensibilizado y se hayan conmovido. Para mí eso es muy hermoso”.
“Como un océano de fuego”, estrenada en julio del año pasado con una temporada de 10 funciones en el TBB, toma como inspiración las crisis existenciales provocadas por la vorágine y rapidez de la vida cotidiana que desatan incendios fogosos en nuestro interior. Cada persona tiene sus estrategias para apaciguar, contener u oprimir este fuego latente. Así, la pieza apuesta porque el cuerpo y sus intensidades, y la externalización de sus sensaciones internas, sean las que expresen y desplieguen toda la dramaturgia y el desarrollo emocional. No se utilizan palabras, ni existe una narración lineal, sino que se intenta generar una experiencia donde el público pueda verse reflejado, en un nivel sensorial y corporal.
“Pese a que la primera impresión sea que la obra es abstracta, igualmente las personas generan relatos y lecturas, principalmente emocionales, lo que me parece vital e importante, ya que no son tantos los espacios colectivos donde se dé valor a la interpretación emocional y simbólica”, señaló Fernanda Coloma, bailarina integrante del elenco de “Como un océano de fuego”.
Intérprete escénica que también se refirió al provechoso proceso de itinerancia y lo desafiante de realizar más de una sola función en diversos escenarios. “Lo más desafiante fue ir adaptándose a cada espacio, con dimensiones, voluntades y tratos distintos y, rápidamente había que adecuarse a ello, hasta modificar trayectos coreográficos in situ. Ello significaba que, al momento de realizar la obra, había que considerar esas modificaciones y para eso había que estar presente e incluso un poco alerta algunas veces”.
Las entradas para “Como un océano de fuego” en Sala 100 tienen un valor de $6.000 general y $4.000 estudiantes y tercera edad. Disponibles a través del sitio web artistasdelacero.cl.
*Si bien lo de hoy en Sala 100 sería la última función de la itinerancia, aún está por confirmarse una presentación final en la comuna de Chiguayante.