El realizador cinematográfico local, Juan Mora Cid, quien estrenó a fin de 2019 su película “Dominio Vigente”, contó cómo ha enfrentado el coronavirus en Kassel, Alemania. “Acá, se colocó al arte y la cultura como un bien de primera necesidad”, aseguró.
Luego de estrenar acá en su ciudad natal “Dominio Vigente”, casi a fines del año pasado, Juan Mora Cid decidió volver a Kassel, perteneciente a la región de Hessen en Alemania, urbe que se convirtió en su nuevo hogar luego de haber estudiado cine allá, en 2013.
Desde ahí, y con sus seres queridos desde la lejanía, preocupados por lo que se escucha de Europa y la rápida expansión del coronavirus, ha vivido la cuarentena entre la incertidumbre y la esperanza.
“A diferencia de Chile, que todo se centra en Santiago, acá en Alemania, al tener estados federados, cada región toma sus decisiones de forma independiente en base a sus necesidades, y eso tiene muchas ventajas, sobre todo en momentos de crisis”, comentó el realizador audiovisual a la distancia.
Palabras a las que profundiza que “en mi impresión, que vengo de un país en donde la mayoría de las veces la ayuda en momentos de catástrofe es tardía y en muchas ocasiones no llega, acá se aprecia un sistema que está conectado y que todo se alineó, rápidamente, para enfrentar una cuarentena. Eso, pese a que muchos empresarios europeos presionaban para que el país siguiera funcionando, y la canciller junto a su gobierno no dudó en cerrar las escuelas, las fronteras, los aeropuertos, universidades, centros comerciales, en general todo, hasta nuevo aviso”.
Mora, dedicado al cien por ciento en su profesión y pasión por el cine, detalló sobre la reacción del gobierno alemán con el sector cultural y con quienes se dedican a las artes en general. “Alemania decidió, de forma transversal, colocar al arte y la cultura como un bien de primera necesidad, lo cual es muy reconfortante, ya que te sientes avalado en momentos de crisis, en donde las medidas que presenta el Estado van de la mano de un apoyo económico.Ello te permite llevar una cuarentena sin mayores preocupaciones. Lo positivo de toda esta situación es que la gran mayoría de las personas se dieron cuenta que es imposible vivir sin el arte”.
A lo que añadió que “en general, el Estado se ha hecho cargo para que sus ciudadanos no les falte nada y poder así llevar esta medida de prevención -cuarentena- de buena manera. En este sentido, me ha llamado la atención que, en muchos casos, la ayuda entregada por el Estado, fue devuelta por quienes no lo necesitaban. Fueron alrededor de 17 millones de euros los que se devolvieron”.
En cuanto a la vuelta a la normalidad de la ciudad, Mora aseguró que “claramente, es un proceso que aún está en curso. Acá durante marzo y abril se mantuvo todo cerrado, recién en mayo comenzaron a abrir las tiendas comerciales, para luego dar paso a los restaurantes y colegios, todos tomando las medidas de distanciamiento y el uso obligatorio de mascarillas. Esto partió recién cuando el número de contagiados bajó considerablemente”.
Concluyendo que “el año académico se cierra en julio y comienza el período de vacaciones. Siendo bien objetivo, creo que Alemania se prepara para reanudar su funcionamiento ‘normal’ a la vuelta de este período, o sea, entre agosto y septiembre. Ya se plantea para este mes el abrir los aeropuertos dentro de Europa, pero está por verse y como dije todo está en proceso”.