Vecinos esperan que se concrete el traslado de una de las empresas del sector la cual, en julio de este año, debe cumplir con el plazo impuesto tras determinación del municipio de Concepción.
Desde el 2022 los vecinos del sector Palomares se organizaron frente a las molestias por ruidos y contaminación que les ha significado la presencia de la empresa asfáltica de Quilín y Bitumix en su sector, trabajo que dio por resultado que la Municipalidad de Concepción resolviera su traslado hacia otro sector bajo el argumento que presenta Ley General de Urbanismo y Construcciones en su Artículo N°62.
Este señala que “las industrias mal ubicadas, que causen molestias o daños al vecindario, deberán trasladarse dentro del plazo que les señale la Municipalidad”.
Pese a que han sido escuchados, los vecinos de Palomares siguen con las molestias de parte de la empresa que aún no está obligada a retirarse. “Parece que lo hacen a propósito, pero ahora están trabajando de lunes a domingo, sin parar”, señaló Alicia Zavala, presidenta de la Junta de Vecinos Los Álamos del sector Palomares.
Zavala, junto a Ximena Muñoz fueron las primeras en solicitar la salida de la empresa, lo que fue escalando y llegó a una audiencia pública en la Municipalidad de Concepción que determinó el traslado, sin embargo, la situación, lejos de mejorar con esta certeza, para los vecinos ha empeorado.
“Empiezan a las 6 de la mañana y molesta el ruido, el polvo que bota como el humo. Los vecinos ya están aburridos de eso”, detalló la vecina.
Es que el 11 de julio de 2023 la casa edilicia emitió una ordenanza que indica la orden de traslado desde donde se sitúan actualmente, “por encontrarse mal ubicadas y causar daños y molestias al vecindario, conforme lo dispuesto en el segundo inciso del Artículo 62 de la Ley General de Urbanismo y Construcciones, dentro del plazo de un año contando desde la fecha de notificación del presente Decreto”.
Los vecinos han continuado en la dinámica de realizar las denuncias por ruidos molestos, emanaciones de olores. “Incluso estamos pidiendo otra reunión, porque teníamos una en abril, porque todo depende del municipio, nosotros teníamos entendido que ellos si seguían así se podían ir antes de la fecha que se les notificó”, estableció Alicia Zavala.
La otra situación compleja está en el que sólo el traslado está determinado para Quilín y no Bitumix. “La otra empresa apeló y ahí no sabemos cuánto tiempo va a demorar, pero se tienen que ir ambas”, dijo.
Desde la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), el jefe de la oficina Regional del Biobío, Juan Pablo Granzow, señaló que “respecto a los proyectos vinculados a las empresas Quilín Planta Palomares y Bitumix CVV, esta Superintendencia informa que cuenta con un registro total de 16 denuncias en la comuna de Concepción. Las denuncias están vinculadas a la empresa Quilín Planta Palomares, y a la empresa Bitumix CVV Ltda”.
En general, las denuncias están relacionadas principalmente a problemas de emisión de ruidos molestos (14) generados por los procesos de producción de estas plantas de asfalto, localizadas ambas en el sector industrial de Palomares, cita un comunicado de la SMA.
Sobre “Pavimentos Quilín Planta Palomares”, este proyecto cuenta con un total de 16 denuncias en su mayoría vinculadas a ruidos molestos, pero también relacionadas a superación de límites de emisión del Plan de Prevención y/o Descontaminación Atmosférica que rige para el Concepción Metropolitano.
Frente a lo anterior, la Oficina Regional de la SMA en Biobío ha realizado 3 fiscalizaciones al establecimiento, que abarcaron las denuncias indicadas y cuyos resultados se analizan en el nivel central, sobre los que señalaron que se darán a conocer oportunamente a las partes interesadas.
Respecto de la “Planta Bitumix CVV”, el establecimiento cuenta con 1 Resolución de Calificación Ambiental, que fue actualizada y modernizada ambientalmente en 2022 luego de una consulta de pertinencia resuelta por el Servicio de Evaluación Ambiental del Biobío.
Sobre esta planta durante el 2022, la SMA realizó una inspección ambiental con el objetivo de verificar el cumplimiento de su autorización ambiental, los resultados de esta acción se encuentran en análisis por parte de la Superintendencia del Medio Ambiente.
La acción, aparentemente inédita en la Región, tiene un intento previo en la Municipalidad de Talcahuano con una industria de gas. Por otro lado, en Coronel no se ha ejecutado un traslado bajo estos conceptos, pero actualmente la administración se encuentra reformulando su Plano Regulador con lo que, entre otras cosas, se está intentando mejorar la calidad de vida de los habitantes de la comuna en relación a la instalación de fábricas.
Durante la década del 90 se invocó el Artículo 62 de la Ley General de Urbanismo y Construcciones para intentar trasladar a la empresa Gasco en Talcahuano, producto de episodios constantes de contaminación por la producción de gas en base a la quema de carbón.
Sin embargo, este recurso no fue efectivo, pese a que el Ministerio de Vivienda y Urbanismo recomendó el traslado, ya que la empresa recurrió a la Justicia y consiguió plazo para operar durante dos años continuos. “Luego de este plazo, el alcalde de la época, Leocán Portus, decidió la clausura de la producción de dicho elemento. Con esto se cortó la fuente de emanación de gases tóxicos que afectaba a los habitantes de la comuna”, detallaron desde la Municipalidad del puerto.
“Actualmente, no existe ninguna empresa dentro de Talcahuano en la que se pueda determinar la aplicación de este artículo y tampoco hay solicitudes ingresadas al respecto”, señalaron.
En tanto, Maybeline Belmar, directora de Medio Ambiente de la Municipalidad de Coronel, indicó que no se ha invocado este artículo, más bien se ha evitado que ciertas empresas se instalen.
“En base a la lucha de los dirigentes sociales, la sociedad civil y además de la responsabilidad que han tenido las autoridades comunales en esta administración se ha evitado la instalación de un megaproyecto de empresas Copec, el cierre de termoeléctrica bocamina 1 y 2 en la segunda etapa de Colbún Santa María y otro proyecto que al menos ingresó unas 6 o 7 veces al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental que es Cosemar”.
En la Municipalidad de Coronel, se encuentran en proceso de actualización del Plan Regulador Comunal y el Plan Comunal de Desarrollo (Pladeco) se actualizó hace poco. “Antes teníamos un Pladeco en que era pro-industria, pro-empresa, sin mirar ciertas externalidades negativas que estas empresas podían generar en la comunidad”, indicó Belmar.
La intención de la administración actual es poder integrar aspectos ambientales, integrar la mirada de la comunidad. “El alcalde (Boris Chamorro) ha tomado este desafío para que tengamos un plan regulador comunal de acuerdo a las necesidades de la comunidad y tener una mejor calidad de vida”, explicó la directora de Media Ambiente comunal.