Impurezas sobre los límites, falta de etiquetado con descripción real de ingredientes y daños pulmonares observados desde su masificación, son algunas de las observaciones.
En 2022 el Instituto de Salud Pública (ISP) advirtió de los riesgos confirmados en el uso de cigarrillos electrónicos o vapeadores, dispositivos que calienta una pequeña cantidad de líquido convirtiéndolo en un vapor que puede ser inhalado. Tras observaciones alrededor del mundo sobre hospitalizaciones y problemas crónicos de salud en la población que los consumía, 32 países llegaron a la prohibición de la comercialización de cigarrillos electrónicos que contengan nicotina.
Un estudio realizado por el ISP detectó la presencia de “impurezas sobre los límites permitidos, los saborizantes y aromatizantes que contienen no están autorizados para su administración vía inhalatoria”, informaban en su web.
Desde enfermedades bucales hasta cáncer. El Dr. Jorge Yañez Villaseñor, broncopulmonar y académico de la Facultad de Medicina de la Universidad de Concepción destacó que el uso de estos implementos muestra como consecuencia una broncoconstricción, que lleva a que ocurran “fenómenos de sangrado por inflamación de los vasos sanguíneos, que pueden ser de diferente magnitud e incluso muy graves”.
Incluso, señaló Yañez, en los últimos años se ha observado un tipo específico de lesión pulmonar relacionada al uso de cigarrillos electrónicos, llamada “Evali”, (conocida por sus siglas en inglés: E-cigarette, or Vaping, product use Associated Lung Injury), es una seria condición médica en que los pulmones de una persona pueden dañarse por las sustancias contenidas en los cigarrillos electrónicos y el vapeo de sus productos.
“Es una injuria pulmonar aguda que puede llegar al paciente a requerir apoyo con ventilación mecánica y que tiene un porcentaje alto de mortalidad”, explicó. Entre sus síntomas más comunes se encuentra la tos, la respiración rápida, náuseas, dolor en el pecho y falta de aliento. A esto se suman los resultados de un estudio realizado por el Journal of the American College of Cardiology en donde se vinculan directamente el uso de los vapeadores con fallas e insuficiencias cardíacas.
En su momento fueron recomendados como una versión “menos dañina” del cigarrillo común, pero el efecto de los vaporizadores en la salud es notorio a corto plazo. “En general este tipo de vaporizadores va adquiriendo cada vez más uso de población joven. No debería usarse ningún tipo de elemento inhalatorio porque va a producir daño en el pulmón”, determinó el broncopulmonar, explicando que los componentes que pueden tener en la preparación en muchos casos se desconocen y pueden contribuir con “el efecto de daño, sobre todo de cáncer en el pulmón”.