Autoridades de ambas instituciones y del CET Concepción, ubicado en Punta de Parra, participaron en la ceremonia de entrega de diplomas.
Sueños, ideas y proyectos de cambio, aparecen en las palabras de algunas de las nueve personas privadas de libertad que este viernes fueron protagonistas de la ceremonia de cierre del curso de “Manipulación de Alimentos área de repostería y pastelería”, dictado en el Centro de Educación y Trabajo (CET) Concepción por la Fundación Mujer Levántate y la Universidad Católica de la Santísima Concepción, a través de la Unidad Sello Identitario y la Pastoral, gracias a un convenio suscrito entre ambas instituciones.
Susana García, quien habló en representación de los residentes que participaron en el curso, no solo agradeció la oportunidad que tuvieron de ser parte de este programa, también recalcó que muchas personas sí creen en la reinserción y que “tienen manos para poder salir a adelante. Somos muchos los que queremos cambiar y gracias a estos talleres podemos lograrlo”, detalló.
En tanto, la Prorrectora de la UCSC, Dra. Ana Narváez, declaró que, tal como lo ha indicado el Papa Francisco, la sociedad tiene la obligación de trabajar en favor de la reinserción, y los espacios que promueven programas de capacitación laboral y acompañamiento para recomponer vínculos, son signo de esperanza y futuro. “Al abordar la importancia de la reinserción social estamos construyendo puentes hacia una sociedad más compasiva y comprensiva”.
El jefe subrogante del CET Concepción, Suboficial Francisco Salazar, valoró que la Universidad y la Fundación firmaran el convenio que permitió a los internos del centro obtener una certificación de Sence, lo que se traduce en una herramienta para su reinserción en el medio libre. Asimismo, Vasthi Hermosilla, coordinadora regional de la Fundación, destacó que este trabajo conjunto permitió que se dictaran “los cursos de telar y manipulación de alimentos, permitiéndonos llegar a un total de 19 personas privadas de libertad que fueron aprobadas y certificadas por Sence”, agradeciendo el quehacer de la Fundación, la UCSC, Gendarmería, y el Arzobispado de Concepción para que esto fuera posible.