Las autoridades trabajan en definir la estrategia a seguir para el enfrentamiento de la pandemia en cada territorio durante el próximo año, donde el objetivo es mantener un gran porcentaje de funcionarios contratados en el marco del Covid.
Al mediodía de ayer y mediante un comunicado web, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, informó de la extensión de la alerta sanitaria por Covid-19 hasta marzo de 2023. “La medida se adopta de manera preventiva debido a la incertidumbre del escenario epidemiológico que presenta China en este momento”, se informó.
La alerta fue instaurada en el país en febrero de 2020 a raíz de la pandemia, y terminaría el próximo 31 de diciembre, junto a todos sus recursos y políticas extraordinarias. Así, la noticia fue bien recibida por los funcionarios de salud de la zona.
“Es un reconocimiento a lo que venimos diciendo hace harto rato. El gobierno, aunque tardíamente, está dando una señal de que comprende que lo que está pasando en el extranjero y en China, que puede pasar en Chile, y tenemos que estar preparados”, indicó Adolfo Becar, presidente de Fenats.
En tanto, el diputado DC e integrante de la comisión de Salud de la Cámara, Eric Aedo, manifestó que “es una buena medida la anunciada por el gobierno considerando que aún estamos en una situación de riesgo, sobretodo por la variante que está afectando a China”.
El seremi de Salud, Eduardo Barra, afirmó que hace una semana las autoridades sanitarias se mantienen en conversaciones para definir cómo enfrentar la pandemia a partir de enero. “La discusión es cómo se define la estrategia de 2023. Hemos estado conversando y definiendo cómo cada región va enfrentando la situación del próximo año de acuerdo a sus características”, precisó el seremi.
Y en esta línea, la permanencia de trabajadores y trabajadoras contratados en el marco de la alerta sanitaria es una de las principales preocupaciones. En la Región, informó Barra, serían cerca de mil funcionarios en esta condición; contratados por código del trabajo y honorarios en los servicios de salud, hospitales y cesfam de la zona.
“La lógica indica que muchos de esos trabajadores han venido a suplir brechas de personal. Este es uno de los planteamientos que hemos tenido del nivel nacional, sobre cómo no descuidamos el poder cerrar las brechas de personal, y aprovechar esta instancia para, sobre la base de lo que nos permita el Ministerio de Hacienda, suplir esas necesidades del sistema sanitario”, manifestó Barra.
El objetivo, agregó, “es poder mantener al menos un porcentaje de los trabajadores. Queremos que se pueda conservar un importante contingente para enfrentar la pandemia. Pero para eso, veamos lo que nos plantea la autoridad”.
Una opinión similar planteó Aedo: “El martes vamos a recibir el subsecretario de Redes Asistenciales en el Congreso para que nos explique en detalle lo que esta prórroga implicará. Espero que también se extiendan los contratos de los funcionarios que laboran en el sistema público y que han sido fundamentales para la atención de las personas”.
Adolfo Bécar recalcó la importancia de los funcionarios que han llegado en los últimos años al Hospital Regional producto de la alerta sanitaria, quienes al disminuir los casos de Covid, comenzaron a asumir nuevas funciones; y vienen a cerrar brechas; tal como indicó el seremi de salud.
“En estos momentos que no hay tanto paciente Covid, el 90% de los funcionarios que están trabajando y fueron contratados por la alerta sanitaria, deben permanecer porque son parte de la brecha, de esta falta de personal. Por eso, pedimos la readecuación en lugares como la urgencia, laboratorio central, psiquiatría, medicina. Las áreas clínicas del hospital, donde están hospitalizados los pacientes. Es donde faltan manos para hacer la pega”, indicó el dirigente.
Tales unidades mencionadas, sostuvo Bécar, son las más necesitadas en este momento. “En todas partes tenemos sobrecarga de trabajo. En alimentación, lavandería, por ejemplo. Si hablamos aumentar las manos de técnicos hoy, en laboratorio central, significa que los exámenes salen mas rápido”, ejemplificó.
Asimismo, profesionales como kinesiólogos, fonoaudiólogos y terapeutas ocupacionales que llegaron al recinto en medio de la pandemia, hoy son indispensables.
“Esos profesionales, que teníamos muy poquitos y solo llegaban durante los meses de invierno por enfermedades respiratorias, necesitamos que se queden y formar un staff con profesionales de ese perfil, porque mejoran mucho las condiciones de vida de los pacientes, y por otro lado, entregan manos que el hospital no ha tenido nunca”, cerró.