Explicaron que la seguidilla de hechos que vulneraron a niños, niñas y adolescentes del centro presente en Talcahuano, debía ser abordada de forma drástica. Pero, aún, faltan acciones de mayor protección.
Con buenos ojos tomaron los representantes de la Región del Biobío en el Congreso, la decisión adoptada por el gobierno del Presidente Gabriel Boric de llevar a cabo el cierre de la cuestionada residencia Carlos Macera de Talcahuano.
Decisión que fue dada a conocer el fin de semana por el seremi de Desarrollo Social y Familia, Hedson Díaz, y la directora (s) del Servicio Especializado de la Niñez, Carolina Bascuñán, quienes tras una serie de fiscalizaciones, comunicaron el traslado de los 14 niños, niñas y adolescentes (NNA) residentes. Ello fue comunicado al organismo colaborador, a las familias y tutores, así como a los abogados que los representan.
“Es una decisión acertada desde el gobierno, por todas las situaciones que se arrastran desde la balacera que se dio en el año 2020 y las acusaciones de abuso sexual de parte de funcionarios a niños al interior del hogar. Antecedentes que se suman a las condiciones paupérrimas del lugar, que se arrastraban hace tiempo. Se debió mejorar las condiciones, ya que NNA estaban ahí por haber sido vulnerados en sus derechos, pero no se cumplió”, comentó el senador del PS, Gastón Saavedra.
Asimismo, la diputada del Distrito 20, Marlene Pérez (UDI), señaló que “ante la seguidilla de hechos de vulneración de derechos brutales, el cierre del Hogar Carlos Macera responde a que ya era hora de tomar medidas drásticas al respecto y así dar una señal clara que vamos hacernos cargo de una deuda que tenemos con nuestros niños, niñas y adolescentes”.
En ese sentido, la diputada Pérez añadió que “la decisión que ha tomado el gobierno va en el camino correcto, en no permitir más vulneraciones, menos en residencias de administración estatal. Lo más importante es que tanto el Gobierno como los diferentes actores responsables de la administración del Estado procuremos que casos como estos no vuelvan a ocurrir. Por mi parte existe plena disposición para legislar y trabajar a favor de cualquier iniciativa que vaya en pro de la protección y bienestar de los NNA de nuestro país”.
Por su parte, el senador de la UDI, Enrique van Rysselberghe señaló que “el cierre de la residencia Carlos Macera de Talcahuano era una medida que se tenía que tomar, desde mi perspectiva hace ya tiempo, considerando los constantes problemas y denuncias relacionadas a la vulneración de derechos de niños, niñas y adolescentes que durante los últimos dos años conoció la opinión pública”.
En cuanto a lo que viene, los congresistas del Biobío detallaron que se deben comprometer acciones por parte del Estado para dar una real protección a los NNA institucionalizados, considerando que las problemáticas se arrastran por años.
“En ese sentido, considerando que el presidente Boric preside la comisión de Niñez, algo que nunca había pasado con las anteriores administraciones, consecuencia que se debe destacar, se privilegia los derechos y protección de los más vulnerados, lo que habla bien de la política pública que se está llevando a cabo en esta materia”, destacó el senador Saavedra.
En tanto, el senador Van Rysselberghe indicó que “lo que realmente importa ahora es que el ministerio de Desarrollo Social junto con el Servicio Nacional Mejor Niñez den a conocer a la opinión pública las medidas que han tomado para actualizar los protocolos y la fiscalización en los centros dependientes de organismos colaboradores, cuestión que es fundamental para que nuevos casos de vulneración de derechos de NNA no se vuelvan a producir en nuestra Región, punto sobre el cual nuestras autoridades regionales aún no se han pronunciado y que por ende les insto a hacerlo con sentido de urgencia”.
La diputada por el Distrito 20, María Candelaria Acevedo (PC), enfatizó que “esta medida, creo, es insuficiente, ya que existen una serie de problemas no resueltos por la administración del ex presidente Sebastián Piñera, los que seguirán allí, ya sea en esa residencia u otra, por lo que espero, que el cierre del Hogar Carlos Macera sea el puntapié inicial de una seguidilla de transformaciones en el servicio, con lo cual se resguarde la seguridad y la dignidad de los NNA que llegan a estas residencias”.
Agregó que, “es relevante poder conocer cómo se está implementando el Servicio Mejor Niñez en Biobío y también, revisar el funcionamiento de los servicios colaboradores de Sename”.