En completa soledad se celebró el tradicional we tripantu en torno al canelo que crece en las afueras del centro de atención ambulatoria del hospital Guillermo Grant Benavente de Concepción.
En el llellipul, ceremonia de conexión e interrelación con los espíritus, los antepasados y el universo, estuvo centrado en pedir por el término de la pandemia.
Así lo explicó la facilitadora intercultural, Fresia Norin quien indicó que “con esto pedimos por fuerza y sanidad en todas las personas y en la naturaleza; que esta pandemia termine y nos reencontremos y que nos haga más fuertes”.
En cuanto al trabajo de las facilitadoras interculturales, entre sus tareas figuran apoyar a los pacientes de pueblos originarios y comunidades en la gestión de sus horas médicas, durante su hospitalización, mantener el vínculo con las comunidades y facilitar la comunicación entre el paciente indígena y el médico o equipo clínico.