Más de 1.900 hectáreas consumidas, seis casas destruidas y otros tres inmuebles con daños, es el saldo que hasta el mediodía de este viernes dejaban los incendios forestales que se combaten en las regiones de Bío Bío y Ñuble.
El Bío Bío se mantiene en Alerta Amarilla regional y Alerta Roja comunal en Cabrero, Nacimiento y Santa Juana, totalizando 1.121 hectáreas involucradas, reportó la Onemi.
En el último Comité Operativo de Emergencia se habilitaron albergues para esas tres comunas, en base a la evacuación preventiva en las zonas próximas a los incendios, informó el intendente de la Región del Bío Bío, Sergio Giacaman.
La situación de mayor gravedad se vive en el sector Curalí Alto, de Santa Juana, donde el fuego afecta una superficie de 430 hectáreas, registrándose hasta el momento, tres casas destruidas. Otras tres viviendas resultaron quemadas en el sector La Rinconada, de Nacimiento, donde un incendio abarca cerca de 250 hectáreas.
Otros incendios activos se combaten en el sector Quillehua de Mulchén (180 hectáreas); y en El Membrillar de Cabrero (150 hectáreas), donde se reportó una casa con daños.
En la vecina Región de Ñuble los incendios involucraban una superficie total de 809 hectáreas al mediodía, siendo el de mayor gravedad el registrado en el sector Colliguay (559 Has.), que mantiene bajo Alerta Roja a la comuna de Chillán.
Bajo el presente escenario, recién la mañana de este jueves se logró habilitar la Ruta del Itata, luego que se mantuviera cortada, desde la tarde de ayer jueves, por los focos en el sector.
Otros focos ya controlados, se registraron en el sector Santa Ana, comuna de San Ignacio; y en el sector Pencahue, comuna de Ñiquén.