Nueva tecnología permite descubrir en 40% más la patología en estado avanzado. La autoexploración mamaria, así como la axilar, son vitales aseguran especialistas.
El cáncer de mama, según la Organización Mundial de la Salud, OMS, es uno de los mayores problemas de salud pública, tanto así que, en los últimos 25 años, se duplicó la detección de nuevos casos, llegando a un millón y medio a nivel mundial.
Según la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer de la OMS, en 2018, se diagnosticaron 5.393 nuevos casos de esta enfermedad en Chile y 1.688 murieron por su causa.
Por ello, es vital el desarrollo de nueva tecnología para detectar en forma temprana el cáncer de mama, disminuir la mortalidad y garantizar el acceso temprano al tratamiento.
Consciente de la gravedad de la enfermedad -primera causa de muerte oncológica en el país y que cada día arrasa con la vida de tres mujeres- la Clínica Universitaria de Concepción implementó la toma de biopsia estereotáxica Digital 3D con tomosíntesis, sistema único en el sur de Chile, que permite la detección temprana y evita la metástasis en otros órganos.
“El cáncer de mama, produce problemas graves y con una alta mortalidad, pero si se descubre en una etapa inicial, el tratamiento curativo garantiza un 100% de sobrevida”, aseguró Mauricio Ochoa, médico jefe del servicio de Imagen Mamaria de Clínica Universitaria Concepción.
La nueva biopsia, según explicó el especialista, es un sistema que permite detectar un 40% más la patología en un estado avanzado.
La técnica, avalada a nivel internacional, permite localizar la lesión para su posterior análisis, sin la necesidad de extraer el tejido por completo, evita un procedimiento invasivo, no obstante, según dijo, es igual de efectivo.
Con el procedimiento, se toma una biopsia con una precisión milimétrica, entregando de una lesión benigna o maligna. “Gran parte de las muestras que analizamos con esta tecnología, nos ayudan a localizar el cáncer en una etapa precoz, o bien, cuando aún no se han desarrollado lesiones precursoras”, destacó Ochoa.
Claudia Valenzuela, 55 años, debió someterse a una mastectomía total cuando tenía 30 años. “Yo no me di cuenta de lo que estaba pasando, sólo lo advertí cuando empecé a perder sangre por el pezón. Era tanto el avance del cáncer que, incluso, me sacaron el útero y los ovarios, que también estaban comprometidos. Creo que con las nuevas tecnologías, quizás mi suerte habría sido distinta”.
Desde hace un par de años que Clínica Universitaria Concepción tiene disponible mamografía digital Directa 3D, ahora gracias a la biopsia estereotáxica digital 3D con tomosíntesis, logran una mayor precisión y rapidez en la detección.
Para Ochoa, el cáncer requiere de una mirada especial y emocional, por lo que acompañar a la mujer en este difícil proceso es fundamental. Por ello, según dijo, el equipo de la clínica orienta y acompañar a las pacientes durante su tratamiento. “El llamado a la comunidad femenina es a informarse sobre el tema y realizarse exámenes anuales”.
El subsecretario de Redes Asistenciales, Arturo Zúñiga, recientemente visitó el Cesfam Víctor Manuel Fernández, que implementó un equipo digital 2D para hacer exámenes de chequeo y diagnóstico inicial mediante imágenes de mamografía bilaterial, unilateral y proyecciones complementarias de mama, como la axilar.
Con la tecnología, que implicó una inversión de $170 millones del Minsal, aumentarán la cobertura de mamografías de 39 a 80%, beneficiando a mujeres entre 50 y 69 años. Según Zúñiga, se pasará de 600 mamografías realizadas en 2019 a 6.500 en 2020.
“La atención primaria es fundamental y, obviamente, cuanto más la dotamos para realizar una atención más resolutiva es mejor (…), haremos más de 10 veces lo que actualmente se estaba haciendo en mamografía”.
Detalló que los exámenes serán analizados y respondidos en un máximo de 72 horas, a través del hospital digital, que cuenta con radiólogos especializados para dar respuesta a cada centro que lo solicita, dando paso al ingreso al Auge en caso de ser necesario.
La imagenología es, sin lugar a dudas, un aporte para la detección del cáncer de mamas, también colabora en ello la autoexploración de las mamas, pero pocas veces se coloca énfasis en la palpación axilar, considerando que un posible tumor podría haber drenado hacia los ganglios linfáticos de las axilas.
Antonia Toledo, presidenta de la Fundación de Pacientes Nuevo Renacer, que agrupa a pacientes con esta enfermedad, explicó que “algunas veces, un cáncer de mama se puede propagar a los ganglios linfáticos de las axilas y causar una hinchazón o protuberancia, aún antes que el tumor sea lo suficientemente grande para poderlo palpar o tocar”.
Aseveró que en el país la mortalidad por cáncer metastásico creció en 37% en los últimos años, principalmente, por consultas tardías. “El diagnóstico precoz es muy importante y, por eso, se recomienda realizarse el examen de autoexploración una vez al mes, el que, además de la mama, debe incluir las axilas por si hay un ganglio inflamado al recibir el drenaje de un tumor en la mama”, explicó.
Lo ideal es realizar la autoexploración en la ducha “ya que con el agua jabonosa es más fácil encontrar anomalías. Lo mismo para examinar la axila se deben hacer movimientos circulares con la yema de los dedos, tratando de determinar la presencia de masas, engrosamiento, abultamientos o zonas blandas”.
Hoy la fundación lucha para que las pacientes con cáncer de mama metastásico accedan a los medicamentos avanzados que requieren, como es el caso de la terapia con inhibidores de ciclina, que hoy no están cubiertos por el sistema de salud y que permiten detener el crecimiento del tumor.
“Todas las mujeres con cáncer de mama, sin importar en la etapa de la enfermedad en que se encuentren, tienen derecho a todos los tratamientos disponibles en el país. La mayoría son jefas de hogar entre 40 y 65 años, son abuelas o tienen hijos pequeños”, agrega la presidenta de la fundación.