Con cánticos y consignas los docentes en actividad y jubilados plantearon sus peticiones, y anunciaron el paro nacional de dos días que culmina este miércoles.
Con una masiva convocatoria, el Colegio de Profesores marchó este lunes por el centro de Concepción demandando mejoras en la calidad de la educación, mejores sueldos y el fin a proyectos como Sala Cuna Universal, que a ojos de ellos producirá un desmedro en la calidad.
La jornada que partió por avenida O’Higgins pasada las 11:30 horas, avanzó hasta Lincoyán, para luego doblar por Barros Arana hasta la Plaza Independencia, donde dirigentes y estudiantes entregaron su visión de la crisis político-social. A su vez, anunciaron la continuidad del paro hasta este miércoles.
Dentro de los manifestantes, destacó la gran presencia de adultos mayores, quienes a paso firme no se quedaron detrás de la marcha, muchos de ellos profesores jubilados, quienes con cartel en mano indicaron sus demandas.
“Es muy emocionante estar acá con quienes fueron mis colegas. He venido a todas las marchas, soy profesora jubilada y no vengo por mí, mi sueldo ya no lo van a arreglar, vengo por mis hijos, mis nietos y los profesores de hoy, no quiero ese país miserable que nos aplasta y nos subyuga y nos tiene en la miseria”, comentó, visiblemente emocionada, Yanina López.
Una vez congregados en la Plaza Independencia, vinieron los discursos, cargados de emotividad y agradecimiento a los estudiantes que dieron el primer paso a este movimiento que ya lleva más de 20 días.
Boris Figueroa, dirigente del Colegio de Profesores de Concepción, señaló que el pueblo despertó gracias a ellos. “Son ellos quienes llevan la bandera de lucha para que todos podamos salir de este sistema neoliberal, el camino es una Asamblea Constituyente y no de un Congreso Constituyente, se debe reformar el sistema de pensiones, no queremos más sueldos miserables”, dijo.
El presidente del Colegio de Profesores de Concepción, Oscar San Martín, complementó que “algo que además nos tiene estancados como gremio es la deuda histórica, que durante 30 años no ha sido escuchada, como otra serie de problemas más que aquejan a la educación pública, como la desviación de fondos a los particulares subvencionados. Hoy la dignidad del profesor está siendo pisoteada, hoy después de jubilados, tenemos sueldos miserables, lo que es una vergüenza. En Chile la visión que hay sobre la educación es totalmente mercantilizada”.
Sebastián Brogca | Agencia UNO