Tras dos intensos procesos eleccionarios en la UdeC y UBB, la colaboración se instaló en el discurso de los planteles locales. El desafío 2019: seguir materializando.
Para las casas de estudio de la zona, 2018 comenzó como el año de la competencia y terminó convertido en el de la colaboración. El diagnóstico compartido es así de claro. Ello, por cuanto el primer semestre se vivieron intensos procesos electorales que, en las universidades de Concepción y del Bío Bío, naturalmente dividieron aguas en sus respectivas comunidades académicas.
En ambos planteles los comicios internos marcaron un quiebre de época. En la tradicional casa de estudios penquista, que este 2019 aguarda por la celebración de su centenario, Sergio Lavanchy, rector por 20 años, desistió de competir por un siguiente período. Misma decisión tomó, en la universidad de calle Collao, Héctor Gaete, en ejercicio desde 2006.
Las opciones de las autoridades académicas abrieron espacio a una serie de candidaturas que tuvieron que lidiar con los rótulos de “continuidad” y “renovación”, como sucede en todo proceso voto a voto.
Y así, tras el conteo, dos cartas conocidas por anteriores arremetidas electorales esta vez emergieron empoderadas por el apoyo mayoritario de los docentes habilitados para sufragar. Dos físicos y dos nuevos rectores: Carlos Saavedra por la Universidad de Concepción y Mauricio Cataldo por la Universidad del Bío Bío.
En la escena pública y en entrevistas con Diario Concepción, los titulares entrantes recogieron desde un principio el llamado hecho con anterioridad por el rector de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Christian Schmitz, quien abogó por la constitución de un capítulo regional del Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas. Una suerte de zonal Bío Bío del Cruch, como ya existe en la Región de Valparaíso.
Lo anterior, atendiendo los desafíos comunes de las casas de estudio, como la descentralización, la retención del talento local y la birregionalidad que supone la creación de la Región de Ñuble. La nueva estructura, asimismo, pretende nutrirse del carácter diverso de los planteles, en tanto, agrupará a una universidad pública no estatal, una estatal y una confesional.
El anuncio oficial del inicio de los esfuerzos para dar prontamente con un Cruch Bío Bío fue dado el 27 de septiembre en Chiguayante, durante la sesión del Consejo de Rectores que tuvo a la Universidad de Concepción como anfitriona. Antes, en la nota de Diario Concepción del 19 de agosto titulada “Rectores UdeC, UBB y Ucsc proyectan labor de futuro zonal Bío Bío del Cruch”, los líderes universitarios de la zona comenzaron a dar luces del trabajo que se vislumbra.
“El fortalecimiento de las estructuras regionales del Cruch es absolutamente relevante. Así que la asociación con la Ucsc y la UBB es parte de la política de alianzas que se dinamiza con la Ley de Educación Superior y también parte de nuestro compromiso con la descentralización”, indicó en la oportunidad el rector UdeC Carlos Saavedra.
A renglón seguido, Mauricio Cataldo de la UBB expresó que “es importante la colaboración, sobre todo, porque somos universidades regionales. Eso creo que es el factor que nos tiene que cohesionar. Desde ese punto de vista tenemos que generar estrategias conjuntas y alianzas para, en ciertos temas, ir en un frente común”.
Christian Schmitz, rector de la Ucsc, detalló las que, en su visión, debieran ser las tareas inmediatas del Cruch local. Acciones compartidas que se alzan como los primeros propósitos de 2019: “Tener reuniones mensuales ordinarias, una presidencia temporal, un nombre, un logo, una sede propia, pero aparte de ello, se hace necesario que esta intención baje a la comunidad universitaria y se involucren académicos y administrativos en mesas de trabajo conjunto”.
