Aún conectada a un ventilador mecánico y sedada se mantiene Camila Pérez, joven de 23 años que terminó con un 43% de su cuerpo quemado tras la explosión que afectó a la clínica Sanatorio Alemán.
Durante los últimos días, los médicos a cargo de Camila evaluaron la posibilidad de desconectarla, sin embargo, no fue posible dada su gravedad, consignó Radio Bío Bío.
Para este miércoles está agendada una nueva intervención, de la cual esperan continúe la evolución de la paciente.
Cabe señalar que Camila Pérez, junto a su amiga y compañera en Starbucks Alejandra Villegas, fue una de las primeras trabajadoras en regresar al recinto de salud momentos previos a la explosión. Su compañera, a diferencia de Camila, no sobrevivió al masivo accidente.