Señora Directora:
En relación al proyecto de tarifas eléctricas, aprobado esta semana en la comisión de minería y energía del Senado, llama profundamente la atención, que nadie, ni el Ministerio de Energía ni ningún medio de comunicación, publique lo que probablemente más le importe a la ciudadanía; ¿Cuánto va a subir la “cuenta de la luz” con este proyecto?
El proyecto de estabilización de las tarifas eléctricas, que dice buscar mitigar las alzas anunciada por la Comisión Nacional de Energía, que sería de un 8% para quienes consumen en promedio menos de 350 kWh (90% de la población), de un alza de un 11% para quienes consumen en promedio entre 350 y 500 kWh (5% de la población), y un alza de un 88% para quienes consumen en promedio más de 500 kWh (5% de la población y el comercio principalmente).
Según lo que se ha presentado por el propio Ministerio de Energía y distintos expertos en la materia en el proceso de tramitación de este proyecto, el alza respecto del precio actual, para la gran mayoría de la población sería de un 12% para el primer semestre, y de más de un 30% para el segundo semestre, llegando a superar el 50% para el año 2025. Para el caso de quienes en promedio consuman entre 350 kWh y 500 kWh, el alza sería de más de un 40% inmediatamente, llegando a superar el 50% el segundo semestre, y para quienes consumen más de 500 kWh promedio, el alza sería sobre un 30% inmediatamente, superando el 40% el segundo semestre. O sea, que para el 95% de la población el proyecto “mitiga” alzas con más alza, y para el sector comercial, que efectivamente reduce el alza anunciada, pero a un significativo 40% de aumento al terminar el año. Por otro lado, el subsidio que incorpora el proyecto de ley, idea de la cual nadie podría estar en contra, lo financian en un 83.3% los propios consumidores. O sea que a todos nos suben la “cuenta de la luz” para subvencionar un grupo de 850 mil familias, correspondiente al 9.5% de los hogares. Esto significa una recaudación absolutamente regresiva, pues en Chile, según CEPAL, somos el país más desigual de Sudamérica a la hora de pagar la cuenta; el quintil más pobre, respecto de su sueldo, paga 3 veces más que el quintil más rico. Será la clase media y las familias más vulnerables quienes financiaran el subsidio, y no el Estado a través de políticas progresivas. De esta forma, pienso podría ayudar mucho al debate público, sobre todo a nivel regional, que pudiese ser explicitada por la autoridad local en materia de energía la pregunta que nos importa en la región ¿Cuánto va a subir la “cuenta de la luz” con este proyecto en la región del Biobío para este año 2024, en su primer y segundo semestre, y para el año 2025?
De seguro, para los habitantes de la región del Biobío, saber esta información tan simple e importante, hará ver al Ministerio de Energía como una institución transparente, que promueve el debate entre los ciudadanos y ciudadanas de forma sincera.
Javier Piedra Fierro
Facultad de Ingeniería – Universidad de Concepción