Señora Directora:
Mientras conmemoramos el Día Internacional de la Educación para destacar este derecho fundamental de las personas, en América Latina nos enfrentamos a un desafío urgente: educar a nuestros adultos y jóvenes en competencias digitales. Conocimiento específico que cada día se hace más indispensable.
La pandemia aceleró la irrupción de la tecnología y este drástico cambio se instaló para quedarse. De acuerdo con la consultora internacional IDC, de aquí al año 2026, Latinoamérica y el Caribe necesitarán 2,5 millones de profesionales y técnicos expertos en TIC, frente a los más de 6 millones de personas que hoy tienen empleo en esta área.
Eso significa que en los próximos 3 años, quienes se especialicen en tecnologías y el mundo digital tienen prácticamente asegurado un puesto de trabajo, ya sea en el país o en los territorios cercanos. Sin embargo, en Chile no estamos formando la cantidad suficiente de técnicos y profesionales que cumplan con el perfil requerido.
¿Cómo nos hacemos cargo? Trabajando juntos entre el sector público, la academia -liceos técnicos, institutos y universidades- más al sector privado. El despliegue de la conectividad en todos los niveles está destinado solo a crecer y, por ello, un esfuerzo coordinado y focalizado, que identifique necesidades según zona geográfica, que sume la infraestructura educacional instalada con el conocimiento y habilidades de expertos de empresas TIC, es la fórmula que se ha mostrado exitosa en otras latitudes para responder como sociedad a esta urgencia.
Silvana Droppelmann