Señora Directora:

El dicho dice, “Errar es humano…”, pero no le parece a usted que llegó la hora de que todas las personas que se presenten a candidatos para cargos elegidos por votación popular y para ser designados por el Presidente de la República en cargos como ministra(o) s, embajadora (e) s, etcétera, sí tengan los respaldos académicos, profesionales, amplias experiencias laborales, etcétera, para ejercer el cargo para el cual son elegida(o)s ó designada(o)s, y para comenzar, aumentar drásticamente los requisitos exigidos hasta el día de hoy.

Pregunta: ¿En cuántos trabajos en Chile, a una chilena ó a un chileno, digamos la señora Juanita ó el tío Rorro, le permitirían cometer errores seguidos y reiterativos en sus respectivos trabajos, manteniéndolos en sus puestos, a cambio tan solo de dar las disculpas del caso, como que no ha pasado nada, pero que lamentablemente en el fondo, demostraría fehacientemente, que no estaban lo suficientemente preparados para ejercer esas labores, en cuántos trabajos en Chile lo permitirían, en cuántos?

Luis Enrique Soler Milla