Señora Directora:
Marc Lalonde, destacado abogado y ministro de Salud en Canadá, publicó en 1974 el reporte “Nuevas Perspectivas sobre la Salud de los Canadienses”, aclamado internacionalmente por generar un cambio radical en las políticas sanitarias tradicionales, al señalar que la enfermedad no sólo está relacionada con factores biológicos o agentes infecciosos, sino también con una serie de condiciones sociales y económicas que definen las circunstancias en que las personas nacen, viven, trabajan y envejecen.
Para ello, analizó los determinantes de la salud desde cuatro grandes categorías: medio ambiente ( factores ambientales y sociales que inciden en salud), estilos de vida (decisiones respecto de la propia salud, en que hábitos perjudiciales conllevan riesgos), biología humana (modeladores como la carga genética y factores hereditarios) y servicios de atención sanitaria (acceso a redes de prestadores y medicamentos). En esa fecha se estableció que las principales causas de la carga de una enfermedad son socioeconómicas, mientras que las políticas sanitarias apuntan más bien al tratamiento de patologías, pero sin intervenir el entorno.
Nuestro país presenta -al menos, comparativamente- buenos indicadores generales de salud; sin embargo, aún recuperamos pacientes para devolverlos a las mismas condiciones de precariedad que los enfermaron previamente. Por ello, actuar de manera integrada sobre los determinantes de la salud es una discusión vigente, pues tiene gran potencial para reducir los efectos negativos de la enfermedad y promover el bienestar general, requiriendo que el personal sanitario y la comunidad, junto a otros actores dentro y fuera del sector salud, alienten el desarrollo de redes que recojan y analicen información del entorno de manera asertiva, generando luego las acciones intersectoriales necesarias para un impacto sanitario efectivo en nuestra población.
Ernesto San Martín Zúñiga
Director de Postgrados en Medicina y Ciencia USS