Señora Directora:
A propósito del profesor José Maza y sus dichos sobre una eventual presidencia de José Antonio Kast, es triste leer a quienes comentan “que se dedique a lo suyo” o “¿qué se mete él en cosas que no le corresponden?”.
En términos simples, la sociedad es una construcción política compuesta por ciudadanos, por lo que desde el más eminente de los científicos hasta el más humilde de los obreros tiene el derecho e incluso la obligación de tener opinión respecto a temas contingentes, ojalá basado en argumentos claros y en un marco de respeto. Solamente así alcanzaremos el anhelado objetivo de convertir este país, caracterizado por su escasa cultura cívica, en un lugar mejor para todos. Incluso me atrevería a decir que el nivel de nuestros dirigentes va en directa relación a nuestra desidia política.
Participemos en el carnaval del diálogo. Es la última fiesta en la que todos estamos invitados.
Fernando Fernández Ulloa