Señor Director:
En las calles céntricas de nuestra ciudad he visto manifestaciones en favor de los regímenes políticos cubano y venezolano, encabezados por partidos políticos de izquierda, tanto del Frente amplio como de partidos más tradicionales que, desde lejos o indisimuladamente, también agitan sus banderas partidarias, junto a las de Cuba y Venezuela, respectivamente.
La misma situación he visto repetida por televisión e internet, ocurre en Santiago y otras ciudades de nuestro país. Ellos, los que marchan en favor de esos regímenes políticos, tienen todo el derecho de hacerlo, libres y democráticamente, gracias a que en nuestro país, con todas las dificultades que tiene, se respetan y se promueven valores democráticos, como corresponde a una república contemporánea, a pesar que ellos defiendan a gobiernos que no sólo son anti democráticos, sino que además dictatoriales, totalitarios y autoritarios, en los cuales el pueblo, a quien dicen ellos defender, vive en una miseria constante, abatidos por la desesperanza y la humillación.
Esta defensa de esos valores, contrarios a los que promueve nuestro país, debe servir para los ciudadanos que apoyan o piensan apoyar a estos partidos y coaliciones políticas pues, me pregunto, realmente desean para Chile un presente y un destino como el de esos países, es decir, gobernar para gente destruida moral y económicamente, mientras ellos, los líderes de este pensamiento, vacacionan en Nueva York, o se auto asignan sueldos millonarios en el congreso nacional y ostentosos en los servicios públicos; no será que estos partidos les gusta que el socialismo consista en pasar el poder de manos de la burguesía al de la burocracia estatal, ahí donde ellos reinan en estos momentos, desgraciadamente debo agregar.
Mauricio de Gilbert