Señor Director:
Llegar a penales era mucho castigo, pero la tanda de definición fue un reflejo de lo que pasó en los últimos 15 minutos del alargue: le pasamos por encima a Portugal. Un equipo mezquino, sucio, poco talentoso y cristianodependiente que la verdad no tuvo por dónde equipararnos, solo contenernos.
Grande mi Roja querida, gracias por hacernos vibrar así una vez más y darnos una nueva final. ¡Chile, lo más grande!
Paulo Domic