CONCETUERCA, por Fabián Rodríguez R.
CONCETUERCA, por Fabián Rodríguez R.
Esta semana vamos al revés, sin foto. No hablaremos de una moto, sino de un tipo de motos:la moto usada.
La moto usada puede ser cualquier moto. Una moto nueva recién comprada se convertirá en usada en cuanto cruza el umbral de la puerta del concesionario. Desde este momento en adelante comenzará a disminuir su valor. He ahí el primer punto.
Presupuesto: Siempre es bueno saber cuál es tu presupuesto, pero también saber que al comprar una moto usada puedes excederlo, podrías necesitar renovar algunas partes víctimas del desgaste natural que al principio no se nota.
Kilometraje: Este factor es importante sólo si el dueño del vehículo usado no ha sido cuidadoso. Es posible encontrar motos del ‘90 o anteriores, muy bien cuidadas, incluso con mucho kilometraje. Sin embargo, igual hay que estar atento, los motores no son infinitos. Sobre todo en las motos chinas el kilometraje pasa la cuenta, a veces muy rápido.
Partida: Si la moto no prende, no la compres;si le cuesta el encendido y titilan las luces, está gastada la batería (gastarás aproximadamente $20.000 extra en comprar otra). Todo el sistema eléctrico debe funcionar impecable, desde la batería, el tablero, las luces, y la(s) bujía(s).
Sonido: una vez encendida, no se debe escuchar ruido de “latas sueltas” ni el “tac – tac” de las válvulas mal reguladas, a mediano plazo implicará gastar más de la cuenta.
Neumáticos y frenos: Una rápida revisión te ayudará a saber si los neumáticos aún sirven; en las ranuras debe caber, mínimo, un palito de fósforo. Los discos de freno deben estar brillantes y sin ranuras;los de tambor deben ceder a la mínima presión.
Telescópicas: no debe haber fuga de líquido lubricante. De haber, significa cambio de retenes.
Números: Lo más importante es fijarse que el número de chasis y de motor correspondan con los de los documentos, estos se encuentran grabados en la parte delantera del chasis y en la parte baja del motor, respectivamente.