La realidad opresora, y la pérdida del miedo sobre la base de la organización y el trabajo colectivo, fueron los principales factores que impulsaron a los alumnos de la UdeC a recuperar su federación en 1983, la cual fue clave en el movimiento social que terminó por derrocar al régimen militar.
Valeria Tapia, estudiante de Trabajo Social, encabezó la opción ganadora.