Bonos, IFE y retiros de fondos de AFP han hecho que la situación sea de riesgo permanente. Analistas temen que las dificultades económicas terminen convirtiéndose en una hiperinflación.
Se advierte que sin ahorro ni inversión no habrá capital para producir en un par de años. Ante el riesgo de sobrecaliento estiman prudente subir la tasa de interés, congelar la discusión de un cuarto retiro y contener el gasto público.
Serían unos US\$7 mil millones en este nuevo esfuerzo fiscal que busca ayudar a los hogares afectados económicamente por la pandemia, pero preocupa el creciente déficit fiscal.